21 DéC. 2017 Fútbol internacional Hasta que llegó su hora El Celtic perdió 4-0 tras 69 partidos invicto, el Inter cae por primera vez este curso y Guardiola avisa que lo de ganar «es la excepción» Joseba VIVANCO «Vamos a perder partidos. Lo de ahora es una excepción. Me gustaría mandar ese mensaje: esto es una excepción, no es normal. Estamos felices y queremos prolongarlo lo máximo posible, pero es una excepción. Los equipos pierden partidos y eso es lo que va a suceder». Lo decía Pep Guardiola, un entrenador como pocos habituado a ganar y con un envidiable palmarés de 21 títulos como entrenador. Un año, siete meses y seis días. El Celtic de Glasgow acumulaba una racha de 69 partidos domésticos invicto –56 en liga– hasta que este fin de semana rendía visita a la cancha del quinto clasificado en la Premiership y salió vapuleado 4-0. La hazaña la protagonizó el Hearts y la parroquia maroon de Tynescastle lo festejó como se merecía. Un marcador inapelable y un día inolvidable para un jovencísimo jugador de solo 16 años, Harry Cochrane, que no solo marcó un gol, el primero que firma como profesional, sino que recibió el premio al mejor jugador del partido... y por su edad se quedó sin el champagne para el ganador. Es la derrota más abultada de los Bhoys desde 2010, y precisamente desde ese año no se daba la circunstancia de que tanto Celtic como Rangers salieran perdedores en la misma jornada, después de que los protestantes se vieran sorprendidos por el St. Johnstone en Hampden Park. Líderes unos, terceros los otros, entre ambos se cuela un Aberdeen que visita a los católicos esta fecha, con solo tres puntos de diferencia en la tabla, lo que da idea de lo apretada que está por fin la liga escocesa aunque solo sea por una vez. A pesar del 4-0 que le endosaron los de Edimburgo, los jugadores del Celtic fueron despedidos con una gran ovación por su hinchada, tras una racha que le coloca en el top-ten de las mejores del fútbol europeo que encabeza el Steaua Bucarest. El histórico equipo rumano logró el récord de 104 partidos ligueros invicto entre 1986 y 1989, de la mano de jugadores como Belodedici, Lacatus, Piturca o Balint. Por detrás están los 88 del Lincoln gibraltareño, los 63 del Sheriff moldavo, y los 62 que detentaba el propio Celtic escocés a principios del siglo pasado. Pero para meritorios están los 58 que encadenó el Milan de Fabio Capello –heredero del de Arrigo Sacchi– entre 1991 y 1993, que, como anécdota, fue derrotado en un amistoso en febrero de ese último año contra el Athletic en San Mamés, 2-0, con la recordada bolita de papel albal en la que golpeó la pelota que se ‘tragó’ el portero rossonero Rossi. A Fabio aquel resultado le supo a cuerno pelado. Un De Bruyne estelar El Manchester City camina también con paso firme hacía esos números invencibles. Esta jornada tenía un serio rival en su camino, el Tottenham, pero la cosa acabó 4-1 para los locales y Guardiola elogiando el partido estelar de Kevin de Bruyne, «no tengo palabras para describir su actuación». Alabanzas que no dejan de llegar al técnico catalán. «Esto no es normal. Él es especial. Es diferente», ha dicho Frank Lampard. Con la Premier casi en el bolsillo a estas alturas de campeonato, los Citizens tiene por delante cuatro restos: Lograr su primera Champions, finalizar la Liga invictos y emular al Arsenal de Wenger, superar el récord de puntos del Chelsea de Mou (95) y hacer lo propio con el de goles a favor del Chelsea de Carlo Ancelotti (103). De momento va camino de estos dos últimos. Es el club de las principales ligas europeas que mejor media de goles promedia por encuentro, más de tres, y tiene a tres de sus jugadores, Silva, De Bruyne y Sané, entre los cinco futbolistas que más asistencias de gol dan del continente. Por detrás del líder, el United de Mourinho que ganó, el Chelsea que también, el Arsenal que otro tanto –los tres por un solo gol–, y el Liverpool interpretó el rock and roll que tanto le gusta a Jurgen Klopp para golear 0-4 al Bournemouth. El Everton de Rooney coge aire y se hunde en el fondo de la tabla el Swansea galés, al que endosó un 3-1. Ahora empieza el carrusel navideño cde partidos en la Premier y lo hace este viernes con un atractivo Gunners contra Reds. No se despide tampoco el fútbol en Italia, como en la mayoría de ligas, donde de momento la atención la centrará un Juventus-Roma –igualados en la tabla– del que tratarán de sacar tajada Napoli e Inter. El que no levanta cabeza es el Milan de Gennaro Gatusso. Volvió a perder, 3-0, ante el Verona. «Hemos hecho el ridículo», asumió ‘Rino’, que decidió concentrar a la plantilla hasta nuevo aviso y suspender la cena navideña. Hamsik alcanza a Maradona Nadie parece querer aguantar en lo alto de la Serie A, porque de nuevo los napolitanos son líderes aprovechando que los interistas perdieron por sorpresa su primer partido del curso. Así es, en casa, 1-3 ante un Udinese que no se lo creía. «¿Ausilio (director deportivo) dice que el equipo está bien así? Quizá necesitamos algo más para dar un paso más», ha avisado el técnico nerazurro Luciano Spalleti. Derrota que tenía que llegar, como llegó para el ‘il Capo di Napoli’, el eslovado Marek Hamsik, su gol 155 en 11 campañas, con el que iguala los logrados por el ‘Dios’ Diego Armando Maradona como máximo anotador en la historia del club. Tatuajes como segunda piel, su peinado mohicano, una infancia nada fácil, un carácter afable, casado con una conocida modelo eslovaca con la que tiene dos hijos, a Marek, un napolitano más, le gusta colaborar con organizaciones benéficas y no le ha importado implicarse incluso con los tratamientos de algún niño efermo de cáncer. Todo un tipo el capitán del Napoli y deseoso de que este curso sea por fin el del título para los partenopeos. «Cuando ganas aquí es mejor que ganar en cualquier otro lugar del mundo. Porque, nosotros, no ganamos solo como jugadores, lo hacemos como ciudad y pueblo. Eso es lo que lo hace tan especial», es su justificación para no haber salido del club después de más de una década. Tiene 30 años y por delante el tiempo suficiente para que aquí se le encumbre igual a Maradona. «Necesito tener algo más que un cheque y trofeos, necesito sentir algo en mi alma», dicho así, para no quererle. Donde un año más todo parece atado es en la Bundesliga. El Bayern sigue a lo suyo, tercer partido ganando por un gol, mientras se dice que el recambio de futuro para Lewandowski ya está atado en Munich. Se trata de Sandro Wagner, del Hohenffeim, a cambio de unos 15 millones de euros. Su habitual rival, el Dortmund, también hace los deberes: ganó su segundo partido consecutivo y se dice que tiene lista la renovación de Aubameyang. Por cierto, tras el polaco y el gabonés en la tabla de goleadores se sitúa un viejo conocido de la Real Sociedad, el islandés Alfred Finnbogason, con 11 dianas. Última jornada en Alemania, que no regresa hasta mediados de febrero. Hasta los colegiados alemanes harán pretemporada invernal para aunar criterios... en Mallorca. Quién sabe si en estas mismas islas pasará sus vacaciones el ‘pequeño Mozart’ checo Tomas Rosicky, que a sus 37 años anuncia su retirada. En el año en que comunica su adiós Kaká, a sus 35, o han colgado las botas Pirlo, Xabi Alonso, Lahm, Lampard, Totti... Como dijo el irrepetible salvadoreño ‘Mágico’ González que tanto nos divirtió en el Cádiz, «la curiosidad es el balón». Hoy, somos un poco menos curiosos... ¿O no? Kylian Mbappé cumplió ayer 19 añitos... DE HIJOS CRACKSEn la Eredivise no solo deslumbra el jovencísimo Justin Kluivert en el Ajax, hijo de Patrick. Jordan Larsson, de 20 años, viene de anotar tres goles en dos partidos con el NEC holandés, y es hijo del delantero Henrik Larsson, ex del Celtic y Barça.