La derrota no es lo peor que les sucede a los bilbainos

UNICAJA 93

RETABET B. BASKET 78

Perder frente a Unicaja entraba dentro de las perspectivas de RETAbet Bilbao Basket. Los hombres de negro cayeron porque a día de hoy no pueden ganar a un equipo de Euroliga como Unicaja, aunque ofrecieron una imagen ciertamente apañada. El problema bilbaino no fue la derrota en sí, sino las victorias de Tecnyconta Zaragoza y del Joventut. A falta de cuatro jornadas, los bilbainos van penúltimos y suman un triunfo menos que los maños, y dos menos que la Penya, y tienen el basket average perdido con ambos.

Esa es la realidad que atormenta a día de hoy al club bilbaino, cuyo futuro se presenta tan negro como el color de su camiseta. Huelga decir que la limpia en la plantilla será casi total al final de la temporada, entre jugadores que se retiran o acaban contrato o que no van a seguir, por no hablar del entrenador. Si llega a confirmarse el descenso, habrá que confirmar primero que el club va a salir en la Liga LEB Oro y después armar un equipo. Esta es la realidad, que se presenta en su más cruda expresión.

Del partido de ayer cabe destacar que el conjunto vizcaino cayó dignamente. De hecho, si Bilbao Basket hubiera ofrecido una imagen así en otros partidos de esta misma temporada, igual hubiera sumado alguna victoria más en su casillero. Con todo, de la famosa solidez de 40 minutos que exigía Veljko Mrsic, ni rastro. Encajar un 30-23 en el primer cuarto –con un analgésico triple de Redivo al filo de acabar el período– suele ser sinónimo de derrota. Ceder un parcial de 24-10, como en el tercer asalto, campo abonado para encajar una nueva paliza.

Brillantez esporádica

Los hombres de negro, luego de un mal arranque de partido, consiguieron igualar a 38 en el segundo cuarto. Por desgracia, nunca lograron ponerse en cabeza, y el equipo duró lo que le duraron las fuerzas a Mumbrú.

«En el inicio no hemos defendido como se debe ante un rival como Unicaja», confesaría Veljko Mrsic tras el partido. «Posteriormente hemos mejorado, moviendo mejor el balón en ataque, pero por un lado hemos fallado varios tiros abiertos, y cuando Unicaja ha mejorado en defensa, ya en el tercer cuarto, ha tomado una ventaja definitiva para ganar el partido», añadió el técnico croata.

Jugadores como Tabu o Dejan Todorovic volvieron a no estar a su nivel, mientras que Unicaja, pese a no disputar su partido más brillante, mostró recursos de sobra para no ver peligrar nunca su victoria. Tras el 73-52 del final del tercer cuarto, los bilbainos intentaron apretar un poco más, llegando a ubicarse por debajo de la decena de desventaja. Pero Nedovic, pese a no estar a su mejor nivel, se bastó para no dar opciones.

«Tenemos que ganar tres de los cuatro últimos partidos de la Liga», reconoció un Mrsic que, en todo caso, quiso guardar un hilo de optimismo. «Si mejoramos la defensa y en ataque mantenemos este nivel, tenemos posibilidades para conseguirlo». Así sea.