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JO PUNTUA

De putas, cómicos y tenderos


Por orden del propio Senado, no hubo prostitutas, ni mercaderes, ni actores en los funerales de Julio César. Al gran líder de la casa Julia lo mataron en los idus de marzo del año 44 antes de Cristo un grupo de varias decenas de conspiradores, la mayoría senadores, que por entonces pintaban algo. Entre ellos se encontraba su propio hijo, según dejó escrito Suetonio («Tu quoque, Brute, filii mi!»).

Recupero el hilo. Muerto César, Octavio Augusto, hijo adoptivo de Julio, se convirtió en el primer emperador romano y puso todo su empeño en mejorar el legado. Ha pasado a la historia como el padre de la Pax Romana, protector de las artes, impulsor de las grandes obras arquitectónicas y defensor de las reformas económicas. Pero, sin duda, la decisión que más impacto ha tenido en el devenir de la civilización occidental fue la de crear un padrón universal para todo el imperio. Augusto quería asegurarse de que ni un solo ciudadano romano se librara de los impuestos. Ni de la mili.

Pero lo que consiguió, sin pretenderlo, fue más allá. Si hacemos caso a Lucas el santo, José de Galilea y María, embarazada por la gracia divina (¿la hubieran dejado asistir a los funerales de César?), acudieron a Belén a empadronarse, obligados por el decreto imperial sobre el censo. Como ustedes sabrán, las cosas se precipitaron alrededor del famoso pesebre, y de aquellos polvos, estos lodos: dos milenios de totalitarismo por cortesía de una comunión cristiana que todavía sigue gozando de privilegios e influencias sin justificación.

Total, que hoy El Corte Inglés abre hasta las ocho y Amazon te lleva a casa lo que quieras, sea lo que sea, con entrega gratuita si eres cliente prime. Parece que los comerciantes, al menos, han prosperado. Otra cosa son los tenderos. Respecto a los actores, siguen estando muy perseguidos, especialmente los cómicos con gracia y sentido crítico que se cagan en la Virgen. Y qué decir sobre las putas… que dos mil años no han sido suficientes para superar el pulso machista de la historia.