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JOPUNTUA

Alarma centralizada


Esta semana el Gobierno ha aprobado una prórroga del estado de alarma «in extremis» y con apoyos menguantes. La oposición de derechas comienza a jugar fuerte la carta del desgaste de Sánchez, mientras que los independentistas catalanes navegan el malestar que se ha extendido por el recorte de competencias a la Generalitat, que buena parte de los catalanes consideran que habría gestionado mejor la crisis. Así que Sánchez ha reorientado su política de alianzas para dar un lugar preferente a Ciudadanos, mientras mantiene su cercanía al PNV.

Lo más interesante de la sesión fue que, pese a la debilidad con la que llegó el Gobierno al Congreso, los socios necesarios se comieron el decreto presentado por Sánchez, con variaciones mínimas en el redactado como es la famosa enmienda jeltzale, que ni siquiera obliga a pactar la desescalada con las autonomías, pues solo dice que «el Gobierno podrá acordar conjuntamente con cada Comunidad Autónoma» etc.

Este gol de Sánchez solo se explica por su capacidad para imponer el relato. El Gobierno ha sostenido que ese decreto era lo único que podía mantener las medidas de distanciamiento social, por lo que se ha cerrado en banda a hacer modificaciones. Esto o el caos, dijo Sánchez. Y así han mantenido el mando único en la fase de la desescalada, alargando ya más de dos meses la desactivación autonómica. Sí han introducido, en cambio, la posibilidad de que Euskadi celebre elecciones, que era en realidad lo único que buscaba el PNV.

Recapitulemos pues: se supone que un estado de alarma puede permitir que todo el mundo vaya a trabajar, las visitas a domicilios, que los comercios abran, celebrar elecciones, reabrir playas, en seguida los viajes... pero no puede encajar que las comunidades decidan sobre sus competencias. La cultura política española es especialista en camuflar como problemas jurídicos lo que son puramente políticos. Si el Gobierno tiene sus competencias centralizadas es porque quiere, porque cree que en Madrid se gestiona mejor. Lo mínimo será que sus socios expliquen por qué están de acuerdo.