MEDIDAS PARA ACABAR CON LA «SANGRÍA»

LA MAYORÍA SINDICAL SE CONCENTRÓ AYER EN LA AVENIDA OLARIZU DE GASTEIZ, DONDE EL LUNES FALLECIÓ UN OBRERO DE 47 AñOS TRAS CAER DE UN ANDAMIO. LAS CENTRALES RECLAMARON A LAS INSTITUCIONES MEDIDAS PARA ACABAR CON UNA «SANGRÍA» QUE SE HA COBRADO LA VIDA DE TRES TRABAJADORES EN LAS DOS PRIMERAS SEMANAS DEL AñO.

Tres trabajadores han perdido la vida en sus puestos de trabajo en los primeros días del año en Hego Euskal Herria. El 3 de enero falleció un hombre de 59 años en un establecimiento comercial de Barakaldo; una semana después, el día 10, un varón de 47 años murió tras caer de un andamio en Gasteiz; y ese mismo día sufrió un accidente que resultó mortal un joven de 23 años en la cooperativa Hertell de Ikaztegieta. Era natural de Amezketa, y, al igual que en el caso de la capital alavesa, se precipitó al vacío desde una altura.

La mayoría sindical, representada por ELA, LAB, ESK, Steilas, EHNE e Hiru, se concentró ayer en la Avenida Olarizu, frente a la obra en la que murió el albañil, vecino de Gasteiz, para denunciar «el drama humano que estamos sufriendo, sobre todo en determinados sectores, como la construcción».

Así lo indicó Begoña Vázquez, del sindicato ELA, que insistió en que «estos accidentes graves son una muestra de la precariedad laboral, de los ritmos de trabajo que existen y de la subcontratación».

Una idea en la que también incidió Igor Chillón, de LAB, quien comenzó su intervención ante los medios de comunicación mostrando su pesar a los allegados de las víctimas y recordando que el pasado año fallecieron 62 personas en el trabajo en Euskal Herria, siete de ellas a consecuencia de caídas desde altura.

«Esto no es una fatalidad ni es una casualidad. Estamos en un entorno que se caracteriza por un modelo urbanístico especulativo, que ha traído como consecuencia construir a toda prisa y corriendo», manifestó antes de censurar los «altos ritmos de trabajo», en los que no siempre se cumplen las medidas de prevención pertinentes.

«Por eso queremos interpelar directamente a las instituciones, ¿qué van a hacer para que no nos volvamos a encontrar en esta situación de aquí en adelante?», preguntó, haciendo hincapié en la necesidad de acabar con la siniestralidad laboral tanto en Olarizu, donde hace dos años falleció otro obrero de la construcción, como en el resto del país.

«Por nuestra parte, creemos que es momento de tomar medidas efectivas para que no vuelvan a repetirse este tipo de accidentes, y proponemos un plan específico para la construcción, que está viviendo una auténtica sangría», destacó.

Urkullu, con Confebask

Está por ver cuál es la respuesta de la Administración, en especial del Gabinete de Urkullu, que ayer se reunió con los responsables de Confebask en Lehendakaritza, a poco más de un kilómetro de Olarizu. Al encuentro, que tuvo lugar a la misma hora que la concentración sindical, acudieron la consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, y la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia.

El Ejecutivo autonómico y Confebask publicaron sendas notas de prensa sobre la cita, abierta solo a los medios gráficos. Según los comunicados, el presidente de Confebask, Eduardo Zubiaurre, trasladó las «preocupaciones» de la patronal al inquilino de Ajuria Enea.

Hablaron sobre la inflación, el coste de la energía y las materias primas, y el descenso de «la rentabilidad y los márgenes empresariales», así como el «alto número» de bajas provocado por el covid-19.

En este sentido, Zubiaurre planteó ante Urkullu, Mendia y Tapia la «necesidad de actuar para tratar de agilizar lo máximo posible el proceso administrativo de altas».

En las notas no figuraba referencia alguna a la siniestralidad laboral, pese a que son tres las personas fallecidas en menos de quince días.

Hoy mismo tendrá lugar una nueva concentración de la mayoría sindical vasca en Ikaztegieta. Se movilizarán a mediodía frente a la cooperativa Hertell, donde falleció el joven de Amezketa, bajo el lema “No más accidentes laborales. La precariedad mata”.