GARA Euskal Herriko egunkaria

La nueva Constitución define Chile como un «Estado social de derecho»

La Convención Constituyente de Chile ha aprobado definir al país como un «Estado social y democrático de derecho» en la nueva Carta Magna que sustituirá a la heredada de la dictadura de Pinochet.


La Convención que redacta la nueva Constitución en Chile arrancó hace ocho meses entre enormes expectativas y atraviesa un momento delicado, con debates enconados y una campaña de desprestigio lanzada desde ciertos sectores temerosos de perder su statu quo. Eso no impide avances como el del lunes, con la aprobación con un quórum de más de dos tercios un total de 11 artículos que ya forman parte del borrador final, entre los cuales destacan el que define a Chile como «un Estado social y democrático de derecho» y el que consagra al país como una democracia paritaria e inclusiva.

«La protección y garantía de los derechos humanos individuales y colectivos son fundamento del Estado (...) Es deber del Estado generar las condiciones necesarias y proveer los bienes y servicios para asegurar el igual goce de los derechos», recoge una de las disposiciones que prosperaron.

Se trata del primer párrafo que figuraría en la propuesta constitucional, que será sometida el próximo 4 de setiembre a un plebiscito de salida de participación obligatoria para todos los mayores de 18 años.

La aprobación de este artículo fue celebrada por decenas de constituyentes, que vaticinan que con él se pone fin al tipo de Estado actual, que ha tenido un rol subsidiario desde que en 1980, durante la dictadura de Augusto Pinochet, entró en vigor la Carta Magna actual.

Este texto, reformado decenas de veces durante la democracia, blindó las bases de un modelo ultraliberal con servicios básicos privatizados y fue altamente criticado durante el estallido social contra la desigualdad e 2019, que forzó la convocatoria de un proceso constituyente.

«El Estado social democrático de derecho es la llave que va a clausurar el modelo subsidiario, que en 40 años no entregó mejor salud, no entregó mejor pensión, no entregó mejor educación«, afirmó el constituyente izquierdista Jorge Baradit.

En la misma línea, la convencional independiente Lisette Vergara agregó que «con esto se deja de manifiesto que Chile nunca quiso un Estado subsidiario» sino «la protección de las garantías y derechos sociales que son y que encarnan las demandas populares».

Las alarmas saltaron la semana pasada cuando tres encuestas pusieron cifras a la merma de la confianza en la Asamblea Constituyente y situaron por primera vez como ganadora la opción de rechazar la nueva Carta Magna. El sondeo de Cadem volvió a reflejar el pasado domingo que la intención de votar «Rechazo» se mantiene como mayoritaria, con un 44%, frente al 39% del «Apruebo».

La situación preocupa no solo al propio órgano, sino también a expresidentes como Ricardo Lagos o Michelle Bachelet y al propio Gobierno de Gabriel Boric.

«Turbulento» primer mes en La Moneda

El presidente de Chile, Gabriel Boric, cumplió el lunes un mes en el palacio de La Moneda, un periodo que él mismo ha calificado de «turbulento» y que ha estado marcado por el aumento en su desaprobación –ha crecido seis puntos hasta el 44%– debido en parte al complicado panorama económico, a algunos errores de su jefa de Gabinete, la ministra del Interior, Izkia Siches –a quien el mandatario dio todo su apoyo–, y por una oposición que apenas le ha dado tregua en sus ataques a pesar de haber quedado desarticulada tras la contundente derrota del pasado diciembre.

Por delante tiene grandes retos, como lidiar con el conflicto en Wallmapu, hacer frente a la histórica inflación y los desafíos económicos derivados de la pandemia –el Gobierno ya ha impulsado ayudas económicas por 3.700 millones de dólares para amortiguar sus efectos en la ciudadanía–, sacar adelante sus propuestas para cumplir con sus promesas de campaña e impulsar la votación sobre la nueva Constitución.

«Este primer mes se ha asimilado a un despegue de avión: estamos ante un paisaje muy hermoso que es Chile y despegamos con turbulencias que evidentemente generan zozobras e incertidumbres, creo que la vamos a superar y que estamos comenzando», afirmó Boric el domingo tras reunirse con su Gabinete para hacer balance. GARA