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El bloque de Hizbulah pierde la mayoría en Líbano


Hizbulah y sus aliados perdieron la mayoría que tenían en el Parlamento libanés en las elecciones legislativas del domingo. Aunque el partido-movimiento chií, Amal y el Movimiento Patriótico Libre del presidente, Michel Aoun, mantuvieron casi el mismo número de escaños, los diputados que los apoyaban sin estar afiliados no fueron reelegidos, a costa del avance de su principal oponente, el partido Fuerzas Cristianas Libanesas, que obtuvo 18 escaños, frente a los 15 de 2018. El resto se los repartieron la formación del líder druso Walid Jumblatt, pequeños partidos cristianos, cercanos al ex primer ministro suní Saad Hariri así como independientes, todos considerados hostiles a Hizbulah.

La gran novedad fue el avance de los candidatos independientes surgidos de la protesta popular de 2019, que exigía la salida de toda la clase política y una reforma total del sistema basado en el reparto sectario del poder. Consiguieron al menos 13 diputados, en cuyas manos podría estar la formación del nuevo Gobierno. Dos de ellos ganaron, además, el escaño en el bastión de Hizbulah en el sur del país.

Pero la falta de mayorías claras puede bloquear la formación de un Ejecutivo y prolongar la crisis política, lo que, a su vez, retrasaría cualquier solución a la peor crisis socioeconómica en la historia de Líbano.