Liga y Federación avanzan en la negociación arbitral

Día de contrastes el que se vivió ayer en torno al conflicto arbitral que ha dejado sin jornada inaugural a la Liga F. Si la rueda de prensa que ofrecieron las árbitras por la mañana no ofreció la más mínima opción al optimismo, la reunión convocada de urgencia por el Consejo Superior de Deportes (CSD) entre la Liga Profesional de Fútbol Femenino y la Federación Española acercó posturas.

En su comparecencia, las árbitras habían defendido su «independencia» pese a reconocer que la Federación «es nuestra casa» y habían denunciado las «amenazas» de la LPFF, que pide medidas disciplinarias por su incomparecencia a los partidos. Revindicaron su derecho a realizar su trabajo con «dignidad» y de forma «profesional» y, tras mucha insistencia de la prensa, reconocieron que aspiran a cobrar 50.000 euros al año que, añadidos los «gastos de gestión» -seguros, desplazamientos, etc.- le supondrían a la LPFF un desembolso de cinco millones de euros al año, cuando el grueso de sus ingresos ascenderá a once, a repartir entre 16 equipos.

Más modesta es la cifra en la que parecen moverse ahora las negociaciones entre LPFF y RFEF, que realmente es de la que dependen las colegiadas. Se situaría en los 25.000 euros anuales, muy por encima incluso del sueldo mínimo de las jugadoras de la Liga F, que se sitúa en los 16.000.

El parón se prolongará hasta que no haya acuerdo y amenaza también la primera eliminatoria de Copa, que se disputa entre hoy y mañana.