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Borne se zafa de la censura por usar el 49.3 con ayuda del «ni-ni» de LR

El Gobierno francés superó ayer tarde, sin sorpresa, la doble censura lanzada mediante dos mociones por la Nueva Unión Popular Ecológica y Social (Nupes) y la extrema derecha. Todo apuntaba a que la tercera moción de la Nupes, esta vez sobre el 49.3 aplicado al presupuesto de la Seguridad Social, sería rechazada ya en un voto nocturno.

Borne enumeró varias enmiendas aceptadas a última hora a la oposición para defender un proyecto «mejorado» de cuentas. (Julien DE ROSA | AFP)

La primera ministra gala no corría gran riesgo, porque los proponentes de la doble censura no tenían los números, pero el «absentismo» de la derecha de Les Republicains (LR) permitió a Elisabeth Borne salir airosa del debate vespertino, a la espera de que la tercera moción de censura, por el 49.3 sobre el presupuesto de la Seguridad Social, decayera ya en debate nocturno.

La derecha republicana avanzó, de antemano, que no votaría ninguna de las dos mociones sobre la primera parte del presupuesto, ni la firmada por cuatro diputados adscritos a la Nueva Unión Popular Ecológica y Social (Nupes) y avalada por 147 escaños, ni la suscrita por Marine Le Pen con el respaldo de otros 89 diputados de RN.

La posición de Les Républicains ya había quedado marcada desde el domingo, cuando el líder en la sombra y expresidente Nicolas Sarkozy concedió una entrevista a “Le Journal du Dimanche” en la que aseguró que, de tener que volver a hacerlo, daría su apoyo a Emmanuel Macron.

El último presidente de la derecha, que mantiene abiertos sus frentes judiciales, no solo marcaba criterio en vísperas del debate de dos mociones de censura, sino que iba más allá al abogar por una entente estable entre macronismo y derecha republicana, propuesta que no es del gusto del ala «ultra» de la bancada de LR, liderada por el diputado Éric Ciotti, cuyas ideas apenas distan de las tesis lepenistas.

A partir de ahí, la intervención en la tribuna de Olivier Marteix, a quien correspondió exponer ayer las razones de LR, quedaba seriamente devaluada. El diputado se quejó de que el Gobierno no aceptara buena parte de sus enmiendas al Presupuesto y censuró que prefiriera recurrir al 49.3, pero se declaró contrario a favorecer «posiciones de bloqueo», y anunció que su grupo no votaría ninguna de las dos mociones presentadas.

Una tercera moción de censura Marteix explicó que no votaría el texto de la Nupes ni el de RN, cuya líder, Marine Le Pen se garantizó uno de los titulares de la sesión al anunciar que su grupo votaría su moción pero apoyaría también el texto de la izquierda.

Quizás para dar a entender que sigue siendo oposición, LR no descartó que si siguen sin tomarse en cuenta sus aportaciones presente una moción de censura «más adelante». La declaración fue recibida con murmullos y sonrisa en el hemiciclo, ya que el macronismo compensa habitualmente su falta de mayoría con los votos prestados de la derecha.

Tras decaer las dos mociones, Elisabeth Borne y su 49.3 lograban desencallar la primera parte del Presupuesto, aunque LR dejaba sentado que, si quiere sacar adelante, sin tantos sobresaltos, otros proyectos, como la reforma de las pensiones y de la protección de desempleo, deberá prestarse a acordar, esto es a escorarse más a la derecha.