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Forbes, Regan y Yousaf aspiran a suceder a Sturgeon al frente del SNP y del Gobierno


El Partido Nacional Escocés (SNP) confirmó ayer que la titular de Finanzas del Ejecutivo de Escocia, Kate Forbes;la ex secretaria de Seguridad Comunitaria, Ash Regan; y el ministro regional de Sanidad, Humza Yousaf, serán los candidatos a suceder a la ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon.

El SNP reveló que los tres políticos lograron asegurar el número suficiente de apoyos para aspirar a reemplazar a Sturgeon, que el día 15 anunció su dimisión como ministra principal de Escocia y líder de la formación política. Sturgeon, ferviente defensora de la independencia de la región, dejará el Ejecutivo escocés después de ocho años al frente del mismo.

Los militantes del SNP deberán votar por su aspirante mediante el denominado como sistema único transferible, un sistema de voto por orden de preferencia basado en la representación electoral. El nombre del ganador será anunciado el próximo 27 de marzo.

Polémicas declaraciones de Forbes

Hasta hace unos días, Forbes, de 32 años, era considerada la favorita a suceder a Sturgeon, pero ese puesto se tambalea a raíz de su posicionamiento en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo, legal en Escocia desde 2014, y por haber cuestionado a las mujeres transgénero. Forbes, fiel de la evangélica Iglesia Libre de Escocia, defendió que «en línea con la mayoría de las principales religiones, el matrimonio es entre un hombre y una mujer», aunque insistió en que «habría respetado la decisión democrática tomada».

Yousaf tampoco se libra de la polémica. Según la BBC, no acudió a la votación sobre matrimonio igualitario, siendo acusado por un miembro de su propio partido de haber agendado una reunión ese mismo día intencionadamente, para así evitar exponer su visión sobre el tema, algo que el ministro de Sanidad ha negado.

Ash Regan, por su parte, ha centrado su candidatura en la recuperación de la campaña por la independencia escocesa, aunque entre los ciudadanos es conocida principalmente por su oposición a la reforma de Sturgeon, que pretendía establecer un marco legal para la autodeterminación de género, bloqueada por Londres.