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CICLISMO AMATEUR

Dupe aprovecha su primera opción para llamar la atención de los equipos vascos

«Estoy contento porque pensaba que ganar era importante para mostrar mi nivel a grandes equipos como Caja Rural y Laboral Kutxa». El sprinter de Ahurti logró el triunfo en su estreno en el Euskaldun en Zumaia con ayuda de su compañero Dorian Foulon.

Mathieu Dupe, a la derecha, superó en Zumaia a Iker Barandiaran en el sprint. (Oskar MATXIN | FOKU)

Mathieu Dupe (2004), nacido en Baiona y vecino de Ahurti (Lapurdi), aprovechó el sábado en Zumaia una de las pocas opciones que ofrece el Euskaldun para demostrar su calidad de sprinter y llamar la atención de los equipos vascos.

Su éxito recompensó el trabajo del Urt Vélo 64, en el que comenzó hace cinco años para seguir los pasos de su hermano Aurélien, impulsados por su abuelo Marcel Dupe, un aficionado al ciclismo que entró en el club para ayudar a los más jóvenes: «A pesar de llevar cinco años, se puede decir que, por la pandemia, comencé a competir el último».

Le bastó para destacar. Formado en la pista de Anoeta, donde acude los martes a entrenarse y se llevó la Challenge Gipuzkoa Saria, ganó los campeonatos de Francia junior de scratch y persecución, la plata en la persecución por equipos y el bronce en puntuación: «Eran el gran objetivo, sabía que tenía un gran nivel, iba con ambición y salió bien».

Destaca en su progresión el papel de su director en Urt Vélo 64, Christophe Dizy: «Es una relación diferente, no solo de ciclismo, es mi vecino. Ya entrenó a mi hermano, me dijo que veía un potencial en mí y me ayudó para entrar en el Pôle Espoir Paracyclisme, que apoya a personas con discapacidades. Yo no las tengo, pero me permitieron entrar para ayudarlos. Eso me benefició al ir a concentraciones y a Portugal a carreras de pista».

En la ruta ganó una etapa y la regularidad y fue segundo en dos etapas y en la general en el Tour de Abitibi con la selección francesa en Canadá.

UNA VENTAJA

Vivir en el límite de Iparralde con Las Landas le permite elegir entre el calendario vasco y el francés. Por eso, no llevará el maillot de líder del Euskaldun este sábado en Ereño porque prefiere reservarse para correr el domingo en Las Landas: «Buscamos las carreras que nos benefician, para nosotros por la proximidad es interesante participar en el calendario vasco, que se corre de manera diferente».

Y por eso acudió a Zumaia a pesar de que hasta el día anterior había estado concentrado con la selección francesa de pista en París. Solo tuvo tiempo para dormir entre el viaje y la carrera: «Estoy contento porque hay grandes equipos como Caja Rural y Laboral Kutxa en el País Vasco y pensaba que ganar era importante para mostrarles mi nivel».

Destaca la ayuda de su único compañero, Dorian Foulon, seis años mayor, que militó en Caja Rural (2019-20): «Ha corrido varias veces en Zumaia, tiene más experiencia. Cuando faltaba un kilómetro iba a atacar para coger a la fuga y me dijo que no lo hiciera, que no hacía falta, que tuviera calma, que se iba a llegar al sprint».

Dupe evitó las dos caídas que se registraron en el último kilómetro: «No diría que fue por suerte. Había que colocarse bien, me gustan este tipo de llegadas muy técnicas y Dorian ya me había dicho que había caídas en ese final. La pista además ayuda en la técnica, en la colocación y para codearte con los rivales. Estoy con mucha confianza, viendo cómo progreso estos años creo que puedo ganar otras carreras que sean más duras. Prefiero no quedarme solo con ésta».

Tiene claro que su fuerte está en las llegadas en grupos grandes: «Me defino como un corredor rápido que tengo mucha calidad en el sprint. No puedo estar adelante en los grandes puertos, pero sí en subidas que no sean muy largas y duras. Tengo 72-74 kilos y para un sprinter está bien, aunque comparado con los escaladores es mucho».

Lo acusó en las tres primeras pruebas de la Essor Basque: «No tenía el nivel porque venía de la temporada de pista y me faltaba el fondo para acabar bien. Vi una gran diferencia de nivel y de ritmo entre la categoría junior y la amateur».

Por eso asume que «en la ruta el primer año es complicado y el gran objetivo de la temporada son los Europeos de pista en Anadia en Portugal en julio». Compagina sus estudios de Informática con el ciclismo, su ídolo es Van der Poel y su deseo es «ser profesional en la carretera en dos o tres años. El próximo tendré objetivos mayores en ruta con más experiencia y madurez». Y con un equipo más fuerte...