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Ucrania se felicita por haber superado el invierno y envía refuerzos a Bajmut

El Gobierno ucraniano se felicitó por considerar superado el invierno tras los intensos bombardeos rusos contra su infraestructura energéticam que ocasionaron el corte del suministro eléctrico a millones de personas. A la vez, apuesta por resistir en el frente de Bajmut, en el Donbass, pese a que sus fuerzas se hallan prácticamente rodeadas.

Dos mujeres tapan una ventana rota tras un bombardeo en Chasiv Yar, localidad junto a Bajmut. (Dimitir DILKOFF | AFP)

Pasado más de un año de guerra y cuando aún quedan semanas para la primavera, Ucrania se felicitó ayer por haber «conquistado el terror invernal» y superar lo más crudo del invierno ante los bombardeos rusos a su infraestructura eléctrica.

«Hacía frío y estaba oscuro, pero éramos inquebrantables. Ucrania ha conquistado el terror invernal», afirmó el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba. Consideró que la Unión Europea «también ha ganado» porque «no se ha congelado sin el gas ruso», al que renunció para intentar castigar a Moscú.

«¿Así que lograron congelarnos?», ironizó el secretario del Consejo de Seguridad y Defensa, Oleksiï Danilov, que deseó un «feliz primer día de la primavera ucraniana» a sus conciudadanos.

Una serie de ataques rusos con misiles y drones contra infraestructuras de energía causó regularmente cortes masivos de electricidad, calefacción y agua corriente. Millones de personas, incluso en Kiev y otras ciudades importantes, se quedaron sin calefacción con temperaturas invernales.

El operador nacional Ukrenergo ha mantenido el suministro de manera intermitente, pero ayer señaló que el sistema no ha sufrido ningún daño durante los últimos 18 días, en los que Rusia ha disminuido la frecuencia y escala ataques y Kiev ha ido recibiendo sistemas de defensa antiaérea occidentales.

Refuerzo en Bajmut

Los combates se han concentrado durante todo el invierno en el este, en concreto en los alrededores de la ciudad de Bajmut, en la región de Donetsk, donde el Ejército ucraniano admite ya una situación «extremadamente tensa».

Las tropas de Moscú han tomado varios lugares al norte en las últimas semanas, cortando tres de las cuatro rutas de suministro ucraniano. La Policía cerró al tráfico ayer la única carretera abierta, que conduce de Bajmut a Chasiv Yar, la ciudad justo al oeste.

Con las fuerzas ucranianas prácticamente rodeadas se consideraba que había llegado el momento de la retirada y de situar las defensas en otras posiciones, tras una fuerte resistencia que ha convertido la batalla en una carnicería con grandes bajas en ambos bandos. Pero el portavoz del Comando Este del Ejército ucraniano, Serguii Cherevaty, negó que estuviera en marcha el repliegue. «Dependerá de la situación operativa. Hasta el momento, no se ha tomado tal decisión», afirmó.

La estrategia ucraniana parece ser la contraria, seguir resistiendo para desgastar a las fuerzas rusas y ganar tiempo para preparar una contraofensiva con las nuevas armas occidentales. Así, la viceministra de Defensa, Hanna Maliar, anunció el envío de refuerzos a Bajmut y subrayó que la decisión responde a intereses puramente militares, y negó «motivación política» alguna.

Lukashenko apoya en Pekín la propuesta de paz china

El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, de visita en Pekín, mostró su pleno apoyo a las propuestas chinas para una solución a la guerra de Ucrania. «Bielorrusia está haciendo una campaña activa a favor de las propuestas de paz y apoya plenamente su iniciativa para la seguridad internacional», indicó a su homólogo chino, Xi Jinping. Lukashenko pidió «enfoques nuevos y decisiones políticas responsables» para «evitar una confrontación global que no tendrá vencedores». El plan de 12 puntos publicado por Pekín fue desdeñado por los aliados occidentales de Kiev que desconfían de China a la vez que apuestan por seguir la guerra. Sin embargo, ha aumentado su interés por hablar con Xi, al que visitarán el presidente francés, Emmanuel Macron; la primera ministra italiana, Giorgia Meloni; la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, y el del Consejo Europeo, Charles Michel. GARA