José marca la diferencia

Las finales son siempre partidos diferentes, que se juegan con mucha presión y, normalmente es difícil que salgan los mejores partidos en las finales, por eso, cuando se dan, hay que disfrutarlas lo máximo posible, ya que los astros no se alinean todos los días.

En el caso de la final del Parejas de 2023 yo creo que lo que sucedió fue que la pareja de Aspe fue superior tanto adelante como atrás. Al final, es José Javier el que marca la diferencia y luego que Unai no tuvo su día. Para mí, jugó como tenía que hacerlo, asumiendo riesgos y siendo valiente, pero no le salió. Así como 15 días antes en el Labrit le salió todo, ayer no le salió.

En el caso de Zabaleta habrá quien diga que no jugó tan bien como nos tiene acostumbrados, pero siempre le da un poco más que los demás, un poco más que el zaguero que tiene enfrente y para la pareja de Baiko resultó muy desagradable tener que jugar contra él. Es un zaguero que está marcando época, el que más diferencias marca. A la parte final del campeonato ha llegado más justo que al principio, pero es un espectáculo verle pegar con la derecha. Ahora es más regular, ayer no perdió una sola pelota en toda la final, y eso es algo que se gana con la experiencia; en vez de ir a soltarle siempre, fue a sujetar, cortó alguna que otra.. .es lo que se dice, pierdes en chispa pero ganas en experiencia.

Recuerdo cuando ganamos juntos la txapela, hoy no sé si se podría dar de nuevo esa combinación, yo tendría 41 años y supongo que estaría retirado, pero tiene que ser un lujo jugar pudiendo elegir a qué pelota entrar.

Pero no podemos olvidarnos de Aitor Elordi, el comienzo que tuvo fue muy brillante, no parecía un novato. Luego se equivocó en alguna pero para mí jugo muchísimo, echaba la pelota donde quería, valiente, cuando tenía que defender la echaba para atrás, no se complicaba pero cuando tenía que atacar lo hacía sin ningún temor. En su primer campeonato ha jugado con mucha personalidad, apenas ha tenido un día malo y ayer desde el comienzo se le vio valiente y decidido.

Y respecto, a Imaz hay que decir que, jugar contra quien tenía enfrente es muy difícil. Hoy, seguro, todavía tendrán la pena de haber perdido una final, que es una lástima, pero hay que valorar también que han llegado dos años seguidos a la final y eso es muy difícil.