08 MAI 2023 La Liga Árabe ha acordado readmitir a Siria para traerla de vuelta a su redil Ayer, tras once años de suspensión, Siria volvió a formar parte de la Liga Árabe, una decisión que será formalizada el próximo 19 de mayo en la cumbre que se celebrará en Arabia Saudí. Paso a paso la normalización de relaciones con el gobierno sirio está materializándose en la arena internacional, con el impulso chino que ha reconciliado a saudíes e iraníes. Con ello una eventual solución al conflicto se ve más cerca, y antes o después se podrán ver los resultados. Reunión de emergencia de cancilleres de la Liga Árabe en El Cairo. (Khaled DESOUKI | AFP) GARA EL CAIRO Con la búsqueda de un «camino político liderado por los árabes» para resolver la crisis siria como horizonte, los ministros de Exteriores de los estados miembros de la Liga Árabe acordaron ayer restablecer la participación de Siria tras su suspensión hace más de 11 años. La decisión se tomó antes de la Cumbre de la Liga Árabe que se celebrará en Arabia Saudí el 19 de mayo y llega en medio de una oleada de normalización regional de los lazos con Damasco en las últimas semanas. La votación tuvo lugar después de una reunión en Jordania de los principales diplomáticos de Egipto, Irak, Arabia Saudí y Siria la semana pasada, donde llamaron al proceso de traer de vuelta a Damasco al redil árabe la «Iniciativa Jordana». El secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, dijo ayer que el presidente de Siria, Bashar al-Assad, puede asistir a la cumbre «si así lo desea, porque Siria, a partir de esta misma noche, es miembro de pleno derecho de la Liga Árabe y desde mañana por la mañana tienen derecho a ocupar cualquier asiento». LA MEDIACIÓN DE CHINA En un comunicado publicado ayer, el Ministerio de Exteriores sirio indicó que los estados árabes deben buscar «un enfoque efectivo basado en el respeto mutuo». Y también enfatizó la «importancia del trabajo conjunto y el diálogo para enfrentar los desafíos que enfrentan los países árabes». El restablecimiento de los lazos con Damasco se ha venido dando a medida que al-Assad ha ido solidificando su control del territorio sirio, y se ha acelerado tras el mortífero terremoto del pasado 6 de febrero en Turquía y Siria, y sobre todo, con el restablecimiento de los lazos entre Arabia Saudí e Irán, mediado por China, que habían apoyado militarmente a bandos opuestos en el conflicto sirio. Si bien Arabia Saudí se resistió durante mucho tiempo a normalizar las relaciones con al-Assad, el ministro de Exteriores saudí, el príncipe Faisal bin Farhan Al Saud, visitó Damasco el mes pasado por primera vez en más de una década, y los dos países también reabrieron sus embajadas y vuelos entre ellos. A la visita saudí le siguió la semana pasada la del presidente de Irán, Ebrahim Raisi, que también visitó y firmó suculentos acuerdos comerciales, de telecomunicaciones y petroleros a largo plazo. Sin embargo, aún no hay unanimidad en la familia árabe. Kuwait y Qatar se han opuesto a la presencia de al-Assad en la cumbre de la Liga diciendo que una invitación antes de que Damasco acepte negociar un plan de paz sería prematura. Para EEUU, Siria aún es un «Estado canalla» Según dijo el Departamento de Estado, EEUU «no apoya» normalizar lazos con el gobierno del presidente sirio Bashar al-Assad. A pesar de que muchos de sus aliados árabes hayan restablecido relaciones con Damasco, Washington dice que no cambiará su política, seguirá considerando a Siria como un «estado canalla» e instará a los estados árabes a obtener algo a cambio de comprometerse con al-Assad. El secretario de Estado, Antony Blinken dejó en claro que no apoyan la normalización hasta que haya «un proceso político auténtico facilitado por la ONU, de acuerdo con la Resolución del Consejo de Seguridad que pide elecciones libres y justas bajo la supervisión internacional». Pero Blinken y su equipo están hablando con emisarios de al-Assad, entre otras cuestiones para liberar a Austin Tice, periodista estadounidense que desapareció en Siria en 2012. «No vamos a ceder hasta llevarlo a casa», dijo Blinken el pasado miércoles. Al no reconocer EEUU al gobierno de al-Assad como legítimo, no está claro cómo y dónde se están llevando a cabo las negociaciones directas entre Washington y Damasco, pero que están negociando es algo que está fuera de duda. GARA