05 SEPT. 2023 KOLABORAZIOA Ingenieros a la fuga Gorka ITURRATE GARRELL En los últimos tiempos están apareciendo noticias varias acerca de la escasez de personal cualificado y formado para los próximos años en la industria vasca. Recientemente un medio escrito publicaba un estudio que afirmaba que en los últimos tiempos ha decrecido la cantidad de personas empleadas en la industria vasca y, sin embargo, ha aumentado el número de funcionarios. Después realizar esta introducción voy a tratar de explicar mi relato y experiencia personal como ingeniero técnico reconvertido recientemente a funcionario, de momento interino y aspirante a ser de carrera con el tiempo. Los estudios objetivos con números y estadísticas están muy bien pero detrás de esta fachada hay una realidad cada vez más preocupante bajo mi punto de vista. Lo califico de esta manera después de haber acumulado una más o menos larga experiencia y bagaje en el mundo laboral de la industria y la ingeniería. Acabé mis estudios de ingeniería técnica (actual grado) al final del pasado milenio tras haber acabado previamente lo que hoy equivaldría a un ciclo formativo de grado superior. Después de pasar por varios trabajos acabé en una pequeña ingeniería en la cual desarrollé mi carrera laboral durante unos años hasta que comencé a hartarme de las malas condiciones laborales que sufrimos en nuestra profesión los trabajadores por cuenta ajena. Y es que nuestro convenio no es precisamente de los mejores, es más, me atrevería a afirmar con cierta seguridad que tenemos uno de los peores que existen a nivel estatal con, por ejemplo, un máximo de horas trabajadas anuales de 1792, casi el máximo permitido. En mi caso no nos perdonaban ni un cuarto de hora y en las puestas en marcha de las máquinas que desarrollábamos metíamos horas extra sin ningún tipo de retribución a cambio. Lo cual, obviamente, no era legal pero era lo que había, y mi empresa no era la excepción. Llegado a este punto de desmotivación tomé la decisión, teniendo en cuenta que ya tenía una edad en la que era más difícil «competir» con personas más jóvenes, de prepararme para opositar y acceder a trabajar en alguna de las administraciones aún siendo consciente de que iba a ser un camino largo y no exento de dificultades: sacar un perfil de euskara, estudiar leyes, IT txartelas, etc., además de estudiar propiamente para las OPE que tocara. Afortunadamente creo que he tenido suerte, he conseguido sacar todo esto adelante y actualmente me encuentro trabajando de auxiliar administrativo como funcionario interino en el Gobierno Vasco. Y ahora viene la cuestión más interesante e importante que quería abordar en este artículo: no soy el único, más bien somos cada vez más los ingenieros que estamos hartos del trato en la empresa privada y optamos por esta vía sin importarnos lo más mínimo tirar a la basura toda nuestra experiencia para poder tener una vida mejor. En mi entorno más cercano, en un pueblo de 10.000 habitantes, conozco, además del mío, otros cuatro o cinco casos reales similares. Sirva este artículo y esta descripción de una trayectoria laboral que aborda su segunda parte en el trabajo público para hacer reflexionar y pensar un poco sobre uno de los porqués de la escasez de personal cualificado en la industria. Seguro que no es la principal razón pero es una realidad social que ahí está y alguien debería preguntarse qué está pasando e intentar tomar medidas. Difícil, sí. Imposible, no. Somos cada vez más los ingenieros que estamos hartos del trato en la empresa privada