Una concentración en Barakaldo exige «medidas reales» para los sin techo

Barakaldo fue escenario ayer de una nueva protesta para denunciar la muerte de Irune, una mujer sin techo de 42 años que fue hallada sin vida hace una semana en un cajero automático en el barrio de Beurko-Bagatza.

La plataforma contra la exclusión social Berri-Otxoak y el centro asesor de la mujer Argitan exigieron al Ayuntamiento y al resto de instituciones públicas «medidas reales» que den respuesta a la realidad de las personas que carecen de vivienda y malviven en las calles de la localidad.

Denunciaron «la insuficiente dotación de recursos y trabas al acceso a las redes de acogida, al albergue municipal o al empadronamiento». Recordaron que en junio pasado se «cerró el albergue para mujeres sin hogar de Rontegi, que disponía de seis plazas, y prescindió del programa de Educadores de Calle, que daba respuesta a las situaciones de sinhogarismo más crítico».

Ante esta «evidente insuficiencia de servicios sociales de protección, los concentrados reclamaron «una solución y vivienda digna para todas las familias y personas sin hogar».