El Eibar también se estrella en Burgos con otro ejercicio de impotencia

El primer disparo de los azulgranas entre los tres palos llegó en el 73. Berrocal vio la roja y Arbilla es ahora el único central disponible.

El Eibar encajó su cuarta derrota en cinco jornadas, su primer disparo entre los tres pallos llegó en el 73 ya con el Burgos por delante y Luca fue el mejor del equipo en El Plantío. Eso fue el partido de Burgos donde, lejos de encontrar el punto de inflexión que necesitaba, se llevó otro golpe. El hecho de que no mereciera más, por mucho que reaccionara tras el gol, acentúa el amargor de un primer mes de Liga que costará tragar hasta a los más optimistas.

La guinda la puso la expulsión de Berrocal. La certeza de que la plantilla está descompensada, con solo tres centrales en nómina, solo ha necesitado cinco jornadas para mostrarse con toda crudeza. Venancio es baja tras lesionarse la semana pasada y Berrocal tampoco podrá jugar la próxima por sanción, con lo que Arbilla será el único central disponible para su entrenador.

Un Joseba Etxeberria que tampoco ayer dio con la tecla. Ni rabia ni mejoría, el Eibar fue un equipo plano, incapaz de generar peligro en el área, onde Stoichkov se veía solísimo. Luca evitó los goles de Grego y Fer Niño pero no pudo con el penalti transformado por Curro para sentenciar el partido.