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EDITORIALA

La inflación ya daña las pautas alimentarias sanas


La Autoridad Vasca de la Competencia (AVC) ha publicado un estudio sobre la evolución de la inflación entre enero de 2021 y agosto de 2023. Entre las conclusiones destaca, en primer lugar, que en esos dos años y medio los precios han subido un 16%. Traducido a dinero, esa subida de precios significa que el poder de compra, solo en el año 2022, se redujo en 853 euros, esto es, 71 euros mensuales o el equivalente al 6% del salario mínimo interprofesional de ese año. Un recorte del poder adquisitivo muy significativo que afecta especialmente a los presupuestos familiares más reducidos.

Considerando solamente los precios de los alimentos, la parte fundamental de la cesta de la compra diaria, el incremento acumulado alcanza el 26,8%, con lo que el impacto de la inflación en las familias con menores ingresos, que son las que proporcionalmente más gastan en alimentación, ha sido todavía mayor. De hecho, el documento señala que este incremento de los precios ha obligado a la gente a modificar las pautas de consumo y optar por productos de menor calidad o con menores garantías. Un cambio que ilustra la creciente dificultad para mantener una alimentación saludable y equilibrada, lo que redunda en un menor bienestar y a menudo en un mayor impacto ambiental. Las medidas tomadas, como la rebaja del IVA, que el informe considera que en general se ha trasladado al precio final, ha tenido un efecto reducido en comparación con el extraordinario aumento de los precios. Con todo, han contribuido a aliviar el fuerte impacto del alza, especialmente en las familias con menos recursos.

La AVC no ha encontrado indicios de que, tras el aumento de precios, algunas empresas hayan hecho valer su poder de mercado para obtener ganancias extraordinarias. Desgraciadamente, el informe se ha centrado en los productos que más peso tienen en la cesta de la compra dejando fuera otros, como el aceite de oliva, cuyo precio ha subido más de un 30% a causa de la entrada de varios fondos de inversión, alguno como Beka Finance presidido por el exministro de Agricultura Miguel Arias Cañete. En este episodio inflacionario queda todavía mucho por investigar y bastantes medidas por tomar.