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AHT Gelditu reclama en las calles de Iruñea que el dinero del TAV se destine a cuidados

Una nutrida manifestación convocada por el colectivo AHT Gelditu reclamó ayer en las calles de Iruñea que el dinero que se invierte en el tren de alta velocidad se destine a reforzar el sistema de cuidados. El TAV, lamentaron, se apropia de fondos públicos que podrían dedicarse a cubrir necesidades sociales «de una manera colectiva y digna».


Que el dinero del TAV se destine a cuidados es lo que reclamó ayer AHT Gelditu en Iruñea. Bajo el lema “Por el derecho a los cuidados colectivos y al cuidado de la tierra. Elefante txuririk ez!”, la manifestación partió de la avenida Carlos III, frente al Palacio de Nafarroa, y recorrió algunas de las principales plazas y avenidas de la capital navarra.

La marcha estuvo precedida por un gran elefante blanco de madera y una pancarta con el lema “Cuidado con el TAV, con el TAV no hay cuidados”, y durante la misma se corearon consignas como «El dinero del TAV, para gasto social» o «El que quiera llegar antes, que se joda y madrugue». Portavoces de AHT Gelditu indicaron a los medios de comunicación que el TAV «es el elefante blanco más grande de Euskal Herria», ya que se trata de «la infraestructura más destructora, más despilfarradora y más inútil».

«ENGULLE» FONDOS

Los convocantes indicaron que el TAV «se apropia y engulle presupuestos públicos importantes para poder cubrir los cuidados de una manera colectiva y digna» y explicaron que «recientemente se han adjudicado más de 400 millones euros al tren de alta velocidad en Navarra con los fondos Next Generation».

Por otro lado, añadieron que «un entorno saludable, el cuidado de la tierra, es imprescindible para el cuidado de todas las personas y los seres, y vemos que el tren de alta velocidad produce un gran impacto y destrucción en el entorno». Por ese motivo, valoraron que «pedir la paralización del TAV y hacer defensa de la tierra es hacer a favor del cuidado de todas y todos».

Desde AHT Gelditu exigieron la paralización de todas las obras del TAV e hicieron un llamamiento a la clase trabajadora «a organizarnos contra el capitalismo y a luchar a favor de la tierra y a favor de otro modelo de sociedad».