Teresa Errandonea se despide en familia

Los Juegos Olímpicos de París están más cerca. Llegar a la capital francesa en verano era un sueño de Teresa Errandonea para poder repetir cita olímpica tras Tokio 2021 y cerrar una carrera atlética al alcance de muy pocos. Sin embargo, la irundarra, aunque ha trabajado con ahínco para ello, no ha podido superar unas molestias en el tendón de Aquiles -lesión que le impide entrenar al nivel necesario- que le han minado sus ánimos y finalmente ha decidido decir adiós a la competición de alto nivel, como lo hizo ayer oficial en una rueda de prensa en familia.

«No ha sido nada fácil tomar la decisión, pero no me sentía bien. Necesitaba cerrar esta etapa para poder avanzar. Ahora toca centrarme en otras facetas de mi vida aunque quiero agradecer el apoyo que he recibido a lo largo de todos estos años, sobre todo en los que he estado inmersa en el alto nivel. Quiero dar las gracias a mi familia, a mis amigos y amigas, a mi club y entrenadores, a mis compañeros y compañeras y a todos los esponsors e instituciones que han estado a mi lado durante todos estos años», subrayó la atleta guipuzcoana.

Ligada al atletismo desde hace 21 años, Teresa Errandonea dedicará más tiempo a su vida personal y laboral, que ya compaginaba con el alto nivel deportivo (es graduada en Administración y Dirección de Empresas y trabaja en el departamento de finanzas de Salto Systems).

UNA EXITOSA CARRERA

Teresa Errandonea nació en Irun en 1994, en el seno de una familia aficionada al deporte: su tío José María Errandonea fue ciclista profesional y ganó varias etapas en la Vuelta y el Tour. La irundarra comenzó su andadura en este deporte con ocho años en la escuela de atletismo del Bidasoa Atletiko Taldea (BAT) en la temporada 2006/07, en las categorías de alevín e infantil. Ya desde cadete (Sub16), comenzó a cosechar sus primeros títulos y medallas nacionales en las disciplinas de salto de longitud y las vallas con solo 13 años.

Después llegarían cinco títulos de España, las carreras en Europeos y Mundiales, e incluso los Juegos Olímpicos de Tokio 2021.

Es por ello que el BAT subrayó que «no puede estar más orgulloso de haber contado con una atleta como Teresa, a la cual estaremos eternamente agradecidos por su dedicación, sacrificio y lo aportado al club, a la ciudad de Irun y al atletismo Guipuzcoano».