GARA Euskal Herriko egunkaria

La UE aprueba una ley para extraer el 10% de las materias primas en 2030

Los Estados de la Unión Europea dieron ayer el visto bueno definitivo a su nueva ley de materias primas críticas, que busca reducir la dependencia de otras potencias para obtenerlas, fijando metas de extracción, procesado y reciclado. En concreto, la UE deberá extraer localmente un 10% de su consumo anual de estas materias en 2030.

Yacimiento de níquel en Kone, Nueva Caledonia, territorio francés de ultramar. (Delphine MAYEUR | AFP)

El Consejo Europeo dio ayer luz verde final al objetivo acordado con el Parlamento de Estrasburgo para que la UE avance hacia la autosuficiencia y extraiga al menos el 10% de las materias primas críticas que consuma en 2030, siempre que así lo permitan las reservas comunitarias. Este paso supone la adopción final de la ley de materias primas críticas que la Comisión Europea presentó en marzo de 2023 para ayudar a diversificar las importaciones de productos como el litio, el cobalto o el magnesio, entre otros, y garantizar que a partir de 2030 la UE no consigue más del 65% de ellos de un único tercer país como China.

El texto final identifica dos listas de materiales -34 críticos y 17 estratégicos- que son cruciales para las transiciones verde y digital, así como para las industrias espacial y de defensa y fija, además del objetivo de un 10% de extracción local, que el 40% se procesará en la UE y el 25% procederá de materiales reciclados. La cadena de valor de las materias primas estratégicas de la UE se reforzará con la selección y ejecutando proyectos estratégicos, que se beneficiarán especialmente de la agilización de los procesos de concesión de permisos y podrán tener lugar en terceros países. Los proyectos de extracción recibirán sus permisos en un plazo máximo de 27 meses, mientras que los proyectos de reciclaje y procesamiento deberán recibir sus permisos en un período de 15 meses, con excepciones limitadas destinadas a garantizar un compromiso significativo con las comunidades locales afectadas y un adecuado análisis de impacto medioambiental en los casos complejos, según indicó el Consejo Europeo en un comunicado.

Se prevé que la demanda de estas materias crezca exponencialmente en los próximos años. A día de hoy, la UE tiene una extrema dependencia de terceros para obtenerlos: China le proporciona el 98% de las tierras raras y el 93% del magnesio, entre otros minerales de los que es su principal proveedor; Turquía, el 98% del borato; Chile, el 78% del litio; y Sudáfrica, el 71% del platino, entre otros. Este esfuerzo de producción local se acompañará de acuerdos con terceros países afines, como los firmados recientemente con Chile y Uruguay, para diversificar sus fuentes de suministro.

«Esta ley impulsará nuestro sector minero, mejorará nuestras capacidades de reciclado y procesado, creará trabajos locales y de calidad, y asegurará que nuestra industria está lista para las transiciones verde y digital», dijo en un comunicado el ministro de Economía de Flandes, Jo Brouns, en representación de la Presidencia belga del Consejo de la UE.

Los Estados tendrán que crear puntos de contacto únicos entre las administraciones y la industria para facilitar el desarrollo de proyectos estratégicos, mientras que las grandes empresas que fabrican tecnologías estratégicas, como productores de baterías, hidrógeno o generadores renovables, también deberán llevar a cabo una evaluación de riesgos de sus cadenas de suministro para identificar vulnerabilidades. Tras la adopción final del texto por parte de los Veintisiete, el reglamento se publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea y entrará en vigor a los veinte días de su publicación.