GARA Euskal Herriko egunkaria
EL INFIERNO EN GAZA INCENDIA ORIENTE MEDIO

La CIJ exige a Israel parar el genocidio y permitir la entrada de ayuda

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) ordenó ayer a Israel tomar todas las medidas necesarias y efectivas para evitar que su Ejército cometa actos de genocidio y para garantizar el suministro urgente de alimentos básicos a la población palestina en Gaza, evitando la hambruna. Tel Aviv reprogramó la visita de su delegación a Washington para tratar la incursión terrestre sobre Rafah.

Un herido es trasladado al hospital Ahli Arab, en Ciudad de Gaza. (AFP)

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) dictó ayer medidas cautelares adicionales contra Israel para que impida a sus soldados cometer genocidio y obstaculizar la entrega de ayuda humanitaria urgente, después de que Sudáfrica presentase el 6 de marzo una segunda solicitud debido a la situación de amenaza de hambruna total en la Franja de Gaza. El 26 de enero, la CIJ ya emitió medidas que exigían a Israel pasos «inmediatos y efectivos» que impidan la comisión de un genocidio contra los palestinos de la Franja.

Sudáfrica solicitaba esta vez nuevas medidas o una modificación de las anteriores para «garantizar la seguridad de 2,3 millones de palestinos en Gaza, incluidos más de un millón de niños», al tiempo que denunciaba el incumplimiento por parte de Israel de las medidas dictadas previamente, como ha hecho siempre con todas las resoluciones de organismos internacionales, incluidas las de la ONU.

La CIJ advierte de que los civiles en la Franja «ya no solo enfrentan un riesgo de hambruna», sino que «la hambruna se está ya instaurando» y «las condiciones de vida catastróficas de los palestinos han empeorado aún más». Y exige «adoptar todas las medidas necesarias y eficaces para garantizar, sin demora» y en coordinación con la ONU, «el suministro sin obstáculos y a gran escala» de servicios básicos y asistencia humanitaria, incluidos alimentos, agua, electricidad, combustible, refugio, ropa, requisitos de higiene y saneamiento, suministros médicos y atención médica.

Indica también que es necesario «aumentar la capacidad y el número de cruces terrestres, y mantenerlos abiertos el tiempo que sea necesario» para la entrega de ayuda humanitaria que alivie la situación de la población civil en la Franja. E insta a Israel a «garantizar con efecto inmediato que su Ejército no cometa actos que puedan constituir una violación de los derechos de los palestinos en Gaza», incluyendo cualquier medida que impida la entrega de asistencia humanitaria. Por último, le pide que presente un informe dentro de un mes para informar sobre el cumplimiento de esas medidas. Pero no exigió un alto el fuego inmediato a Israel.

Sudáfrica celebró la decisión y reiteró que su cumplimiento solo es posible poniendo fin a las operaciones militares en Gaza y cumpliendo las directivas del tribunal, lo que debe garantizar la comunidad internacional.

Pero el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha insistido una y otra vez en que ignorará todas las demandas de la comunidad internacional, incluidas las de su aliado EEUU para que estudie alternativas a la incursión terrestre en Rafah, donde se hacinan millón y medio de palestinos. Tras suspender la visita de una delegación israelí a Washington por no ejercer este su derecho a veto en la última votación de una resolución sobre Gaza en el Consejo de Seguridad, Israel anunció ayer que enviará una delegación a la Casa Blanca para discutir el plan de incursión terrestre en Rafah, al que la Administración Biden dice oponerse, aunque no rebaja su apoyo incondicional al régimen sionista.



La agresión sionista suma ya 32.552 muertos

Israel continuó ayer desoyendo todos los llamamientos y resoluciones internacionales, y su Ejército siguió bombardeando la Franja de Gaza. Sus ataques mataron en las últimas horas a al menos 66 gazatíes, con lo que el balance de víctimas mortales desde el inicio de la ofensiva militar contra Gaza se eleva ya a al menos 32.552, la inmensa mayoría de ellos civiles, y los heridos suman ya 74.980. A esa cifra de muertos hay que añadir los más de 8.000 cuerpos que se estima siguen bajo los escombros.

Gran parte de las operaciones militares se concentran en el área sureña de Jan Yunis, pero desde el 18 de marzo el Ejército vuelve a asediar el hospital Al-Shifa, en la ciudad de Gaza, donde el Ejército dice haber abatido a unos 200 combatientes y detenido a medio millar de personas a las que vincula a Hamas o la Yihad Islámica. En Jan Yunis, los soldados lanzan ataques alrededor de los hospitales de Nasser y Al-Amal. Al-Jazeera difundió ayer imágenes de la muerte de dos palestinos desarmados que ondeaban una tela blanca cerca de la rotonda de Nabulsi, al suroeste de la ciudad de Gaza, cuando intentaban regresar a sus hogares en el norte.GARA