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El nuevo Frente Popular, que buscará ahora ensancharse, ya es una realidad

Los principales partidos de la izquierda francesa llegaron anoche a un acuerdo para la conformación de una alianza que tiene por objetivo principal hacer frente al auge de la extrema derecha y, de paso, desbancar al macronismo en las próximas elecciones legislativas. «Trabajaremos para ampliar este entendimiento», afirmaron.

Movilización de esta semana en París en favor de la unidad de acción de izquierdas. (Zakaria ABDELKAFI | AFP)

Lo que se venía barruntando en estos días de resaca de la cita electoral del pasado domingo es un hecho desde anoche: los principales partidos de la familia política de la izquierda del Estado francés han llegado a un acuerdo para la configuración de una alianza en aras de hacer frente al auge de la extrema derecha y, también, de desbancar al macronismo.

En un documento con el título “Una página de la Historia de Francia se escribe con el nuevo Frente Popular”, La Francia Insumisa (LFI), el Partido Socialista, Europe Écologie-Les Verts y el Partido Comunista corroboran su acercamiento de posturas en tiempo récord después de que a comienzos de semana anunciaran su intención de formar un «nuevo Frente Popular».

«Con un programa de gobierno y candidaturas únicas, las fuerzas políticas que constituyen el nuevo Frente Popular convocan a los franceses para los días 30 de junio y 7 de julio», fechas de la primera y segunda vuelta de las elecciones legislativas convocadas por Emmanuel Macron tras la amplia victoria de la ultraderecha en las europeas.

CAMBIO «¡DE VERDAD!»

Esas cuatro formaciones políticas completan así el objetivo que se marcaron al día siguiente de la disolución de la Asamblea Nacional gala por mandato del presidente francés.

«A partir de hoy, en toda Francia trabajaremos para ampliar este entendimiento con todas esas asociaciones, sindicatos, partidos políticos y personalidades que participan del debate público y que comparten nuestras ideas», añaden los impulsores del nuevo Frente Popular, al que han dado su apoyo ya formaciones como Place Publique, PRG o Génération-s.

A pesar de la intención expresada por Macron de atraer a «sectores templados» del PS y ecologistas, y a personalidades poco proclives al entendimiento con la LFI, nada más conocerse de acuerdo el exmandatario François Hollande, del PS, dio su respaldo al «entendimiento entre las fuerzas de izquierda».

«Trabajamos en un programa político de ruptura a concretar en los primeros 100 días de mandato, con propuestas concretas y realistas, para que la vida de los franceses cambie, ¡de verdad!», se añade en el documento.

Sus impulsores comenzaron a difundir por sus redes sociales un texto que proclama que «la llegada de Rassemblement National al poder ya no es algo inevitable».