27 SEPT. 2014 COMUNICADO DE ETA ETA cree que llegó la hora de un proceso constituyente acordado en Euskal Herria En un momento en que considera que la defensa del derecho a decidir se ha convertido en el «punto de encuentro de todos los demócratas», ETA afirma que hay «mayoría suficiente» como para dar pasos decisivos en el proceso. GARA DONOSTIA El comunicado remitido por Euskadi Ta Askatasuna a GARA con motivo del Gudari Eguna pivota sobre el derecho a decidir y el favorable escenario que, a su juicio, se ha abierto en Euskal Herria de cara a emprender «un proceso democrático» que, en última instancia, posibilite a la ciudadanía ejercercitarlo. Concretamente, se felicita por el hecho de que exista «una alianza cada vez más amplia» en defensa del derecho a decidir, algo que «durante muchos años no fuimos capaces de hacer». Pone como ejemplo la cadena humana del 8 de junio impulsada por Gure Esku Dago: «Personas de muy distinta ideología y trayectoria política unieron sus manos en la movilización más multitudinaria jamás realizada en Euskal Herria». No obstante, considera que debe hacerse un ejercicio de «reflexión compartida» para ir «más allá de la reivindicación». Exactamente, sobre cuatro claves. En primer lugar, cita el «favorable contexto histórico para acelerar nuestro proceso» en caso de que Euskal Herria «actúe de la mano del resto de pueblos», en un momento en el que este debate está instalado en la agenda internacional a raíz de los casos escocés y catalán. En segundo lugar, dirige su mirada a la posición de los estados español y francés: «No existe, en un plazo medio-corto, la posibilidad de acordar ninguna propuesta que recoja el derecho a decidir. No, al menos, hasta que vean que este pueblo tiene toda la predisposición a avanzar desde la unilateralidad». En tercer término, ETA observa una «reivindicación hegemónica» y una «mayoría suficiente como para dar pasos decisivos. En la medida en que se profundice en el debate y en actos concretos, se adherirán más fuerzas». Y por último, resalta la «cada vez más imperiosa necesidad» de que el pueblo vasco puede hablar y decidir: «Ante las escabechinas que están generando en todos los aspectos las imposiciones que nos llegan desde Madrid y París, Euskal Herria requiere de mecanismos para responder a sus necesidades y a las de sus ciudadanos». Compromiso y generosidad El comunicado incide en la reflexión en torno a la actitud estatal: «Durante muchos años, el reconocimiento del derecho de decisión se ha escenificado como una consecuencia de los pactos a los que había que llegar con los estados. Creemos que, vista la reiterada actitud antidemocrática del Estado español y de las innumerables negativas recibidas, hay que renovar esa visión». Así, concluye que, también en este ámbito, ha llegado la hora de emprender «la vía de la unilateralidad» y del «proceso democrático» que lleve a la ciudadanía vasca a tomar la palabra; es decir, el momento de «un proceso constituyente pensado, acordado y materializado en Euskal Herria», apunta. A sabiendas de que las incógnitas a despejar son de calado -«qué decidir, cuándo, cómo...»-, ETA opina que los agentes que confluyen en la defensa del derecho a decidir deberían abrir «un debate nacional» para, entre todos, identificar y desenredar «esos nudos principales». Y, según añade, en última instancia tendrían que «concretar un acuerdo nacional amplio para su ejercicio, con las formulaciones, los plazos y la programación correspondientes». La organización considera que este país se encuentra en el «momento decisivo para escribir su futuro. Está en manos de los ciudadanos vascos. Hay que actuar con responsabilidad histórica». Es por ello que apela al «compromiso y la generosidad, dejando de lado debates estériles y pensando como pueblo». El comunicado, que comienza con palabras de homenaje a «los gudaris que han perdido la vida en la lucha por Euskal Herria», tanto a los de ETA como a quienes cayeron en la guerra del 36 e incluso con anterioridad, contiene un mensaje para la izquierda abertzale. A la izquierda abertzale Tras destacar que los próximos meses serán «especialmente importantes» para avanzar en el proceso de liberación y que «nos esperan retos enormes» -menciona, entre otros, la construcción nacional, la lucha por los derechos de la clase trabajadora y la vuelta a casa de los presos y exiliados-, ETA afirma que la izquierda independentista «debe tener activos a todos sus militantes, porque una de las claves residirá en tejer alianzas y aunar fuerzas ámbito por ámbito». Y en ese contexto, realiza dos apuntes dirigidos a esas bases y esa militancia. El primero, para que perseveren y no caigan en la resignación «a la que nos quiere llevar el enemigo». El segundo es igual de contundente: «Quienes utilizan maliciosamente la memoria de los gudaris y los símbolos y las reivindicaciones históricas de la izquierda abertzale para dañar la actual estrategia y dividir el movimiento de liberación, no cuentan con el apoyo de ETA. Es más, ETA considera esas actuaciones muy perjudiciales».