09 JAN. 2015 Aduriz se siente en un «gran momento» y trabajará para seguir más allá de 2017 «No será mi último contrato» El donostiarra y un Mikel Balenziaga «en el mejor momento de mi carrera» se muestran agradecidos con la confianza del club. Joseba VIVANCO Sugería el periodista Guillem Balagué, autor de ``Messi'', la biografía autorizada por el argentino, que «la única cosa natural que se necesita para ser un jugador `top' es el impulso para seguir mejorando, la obligación genética de querer ser mejor». Aritz Aduriz, a sus casi 34 años, es uno de esos futbolistas `top', no porque se codee con el `10' blaugrana, Ronaldo y compañía, sino porque tiene el hambre de seguir mejorando sin importarle lo que ponga en su DNI. Y por si había alguna duda tras su renovación, recién salida del horno, ahí queda su `amenaza' de ayer: «A día de hoy ni mucho menos tengo la sensación de que es mi último contrato; además, voy a pelear para que no lo sea. Esto no es un punto y final, quiero seguir rindiendo al máximo y no solo vivir de lo hecho. Quiero aprender y mejorar, disfruto cada día», se sinceró en sala de prensa con la mirada, o mejor, su puntería, puesta en el próximo rival, el colista Elche. El donostiarra y Balenziaga fueron los inevitables protagonistas de ayer en Lezama, en una sesión en la que Guillermo sigue sin aparecer y el joven Williams se mantiene con el primer equipo. Felices, Aritz y Mikel agradecieron la confianza depositada por la Directiva y el entrenador. El de Zumarraga consideró que probablemente esté en uno de los mejores momentos de su carrera profesional y «hay que aprovecharlo», jugándolo todo con Ernesto Valverde, aunque en esta campaña no tenga la regularidad en el juego de la pasada. La prolongación de su contrato hasta nada menos que 2019 inevitablemente suscita dudas sobre un potencial relevo en la cantera a medio-largo plazo para apuntalar el lateral zurdo. Más confianza debiera haber en el relevo de Aduriz en la punta de ataque, aunque las prestaciones de quienes vienen de abajo no sean las mismas que el del Antiguo. El ariete rojiblanco no sabe si a día de hoy atraviesa el momento más óptimo de su dilatada trayectoria, pero sí que «me encuentro en un gran momento. Fuerte físicamente, mentalmente, me encanta salir al campo, competir. Cuando disfrutas todo se traduce. No sé si es mi mejor momento, pero me encuentro muy bien», reiteró el delantero. Al donostiarra no le inquieta la duración del contrato rubricado. Un año, más otro sujeto a unas condiciones que no quiso desvelar. «Es relativo. Cuando vas adquiriendo experiencia es relativo y lo que quieres es rendir. A partir de ahí no hay problema mientras seas honesto en el campo», aclaró. Tanto para él como para Balenziaga, su renovación sabe a gloria. «Cuando sales del Athletic ves que uno no quiere marcharse nunca de aquí», deslizó Mikel y es que ambos tuvieron que hacer las maletas antes de triunfar. Hoy, el de Zumarraga suma y suma minutos en la banda, y eso que la inesperada prolongación de su contrato ha suscitado comentarios de todo tipo entre los aficionados, ya se sabe, uno de esos jugadores que o está al cien por cien, o colecciona detractores más que defensores. Diferente es el papel de Aduriz. Nadie discute hoy su importancia en el equipo. Sus goles. Ayer, el donostiarra volvió a tirar de una falsa modestia por lo evidente. «El año pasado hicimos goles, ocasiones, y este año tenemos más problemas, pero no tiene que ver con un nombre propio, hay muchos jugadores que aparecerán más pronto». Dijo afirmarlo en serio, cuando es palmario que el Athletic tiene un problema de hombres-gol, reconocido hasta por el propio Valverde. Lo que sí confesó Aduriz es que «no lo llevo bien» lo que se ha dado en llamar la `Adurizdependencia'. «Es algo puntual lo del problema del gol, que no tiene que ver conmigo», insistió erre que erre. Edorta Murua se va al fútbol base de la «U» de Chile Edorta Murua, hasta el miércoles responsable de metodología de entrenamiento de Lezama, ya tiene destino. La próxima semana se incorporará a la dirección del fútbol base del Universidad de Chile, y con él viajará Jonathan Cabanelas para asumir alguno de los equipos inferiores. El club andino, uno de los más laureados del país, está entrenado por un viejo conocido del fútbol vasco como es el charrúa Martín Lasarte, ex de la Real Sociedad, y que este verano quiso llevarse como preparador físico a Luis Bonini, quien fuera mano derecha de Marcelo Bielsa durante años. `El Profe', que sigue muy ligado al fútbol chileno, no ha mediado, sin embargo, como se publicó ayer, para que ambos ex de Lezama acaben al otro lado del charco. Tanto Murua como Cabanelas inician así una aventura lejos de Bilbo, como ya comenzaran estos últimos años otros compañeros suyos, caso de Edu Docampo en la cantera del Rubin Kazan tártaro, donde ya lleva dos años, y Vicen Gómez dirigiendo los filiales del Dinamo de Kiev ucraniano. Los `Azules Azules', como se conoce también a la `U' de Chile, cuentan con equipos en categorías inferiores desde los 8 años y disponen de una amplia red de hasta once escuelas por todo el territorio nacional. Ambos se despidieron el miércoles en Lezama, Cabanelas lo hizo de sus jugadores del cadete A que ahora llevará Peio Agirreoa, y queda por saber en qué medida afectará la marcha sobre todo de Edorta Murua. J.V. Avisan de la necesidad de ganar al colista El domingo visita San Mamés el colista y aun así, el propio Ernesto Valverde no dudó el calificarlo como una «auténtica final». Una definición que deja bien a las claras el diagnóstico de este equipo, que no puede por nada del mundo fallar ante el Elche. «La prueba es que contra los equipos de abajo lo hemos hecho francamente mal y eso tiene que quedarnos grabado. Tenemos que cambiarlo radicalmente. Es un partido importantísimo, no podemos fallar y con esa mentalidad hay que salir», dejó claro ayer Aduriz. Un choque que cobra «más importancia» sobre todo después de perder en A Coruña. «Tenemos que ganar en casa, hacer valer esa condición de local que este año no lo estamos haciendo nada bien», reiteró. Y es que, defendió, «somos conscientes de que la Liga es lo que nos da de comer». J.V.