Indar Gorri confirmó a través de un comunicado algo que de manera extraoficial ya se conocía: que no se constituirá como peña. Entre los argumentos para haber adoptado tal decisión está el hecho de que ello supone «perder una de nuestras señas de identidad, ser todos iguales, ir todos a una». A juicio de este grupo, se le obliga a pertenecer a una Federación de Peñas Osasunistas, «que ya hemos visto cómo ha funcionado bajo la presidencia de Germán Urabayen».

El colectivo de aficionados considera que entrar en el Libro de Registro de Aficionados «no es más que entrar de lleno en esa mentira que es el fútbol moderno. Donde los aficionados, previamente registrados, únicamente son necesarios para exprimirles el mayor dinero posible. Un fútbol de horarios infames y gradas vacías, del duopolio y ninguneo al resto de clubes, de fondos de inversiones y patrocinios de oscuras empresas a las que poco les importa la pelota», aseguran en su nota.

La decisión implicará con toda seguridad que ningún hincha pueda entrar al estadio con objetos o distintivos que hagan referencia a Indar Gorri, una prohibición de la que este grupo hace máximo responsable al presidente de la LFP, Javier Tebas. «Un despropósito cuyo máximo responsable no es otro que un antiguo delegado provincial de Fuerza Nueva, presente en el proceso de desaparición del Club Deportivo Badajoz, abogado de personajes que, como se vio, tanto amaban el fútbol, como Dimitri Piterman». Un Javier Tebas que «recientemente ha declarado ante un Juez como imputado por estafa y apropiación indebida, entre otros delitos. ¿Se incluirá usted mismo en esa lista negra de aficionados?», se preguntan.

Continuarán animando

Indar Gorri denuncia que «nos quieren echar de El Sadar, nuestro hogar» y «no sabemos muy bien en base a qué porque, a día de hoy, nadie nos ha explicado exactamente qué ha hecho Indar Gorri». En cualquier caso, en el comunicado se indica que seguirán animando al equipo, desde «una grada que siempre estará en contra de la peor de las violencias, la del poderoso, y, sin dudarlo, contra la xenofobia y el racismo».

«Indar Gorri ha sido, es y será parte del Club Atlético Osasuna, uno de los pocos clubes que aún pertenece a todos nosotros, sus socios. Y por eso seguiremos luchando. Un club que conserva ese antiguo romanticismo de ver cómo chavales de la tierra, como nosotros, como tú, como ella, defienden cada siete días la camiseta roja y el pantalón azul oscuro», ahondan en su escrito remitido a los medios.

Este colectivo de seguidores rojillos anima al resto de la afición a que «en esta dura época que estamos viviendo, debemos tener claro que, todos nosotros, sin excepciones, la afición, somos el único patrimonio del club. Así que os animamos a que con nuestra habitual alegría, continuemos luchando para que el Club Atlético Osasuna siga siendo de nosotros, sus aficionados», finalizan.