06 MAR. 2015 ATLETISMO Lavillenie siempre dice sí El pertiguista busca su cuarto oro en un certamen con pocas estrellas que arrancó con las calificaciones. Los Campeonatos de Europa de pista cubierta comenzaron ayer en el O2 Arena de Praga con un programa limitado a las calificaciones de peso masculino y femenino y a las de longitud masculina. El aperitivo que en los últimos tiempos se estila en el certamen deparó las primeras decepciones, como la eliminación prematura del saltador Kafétien Gomis, que el 22 de febrero fue líder mundial -8,18 en los recientes Campeonatos de Francia- y hoy no estará en la final porque tras hacer dos nulos en el tercer y último salto (7,65) se quedó a 15 centímetros del objetivo. Sin el ausente Greg Rutherford -8,17 el 21 de febrero- y el lesionado Eusebio Cáceres, en el foso no estarán esta tarde los mejores del ranking contiental. Los suecos Torneus (7,97) y Otterling (7,96) fueron ayer los que más se les acercaron. En el peso masculino y aunque la marca de acceso a la final era de unos exigentes 20,55 metros, al alemán David Storl no le tembló el pulso y como doble campeón mundial, doble europeo al aire libre y plata olímpica le bastó con un solo tiro de 21,23 para pujar hoy por su primer oro indoor. Hubo también un récord mundial junior, para el polaco Konrad Bukowiecki, que con 20,46 metros se metió entre los ocho finalistas. A las mujeres se les pedía 17,85 y solo dos cumplieron con el trámite: la húngara Anita Marton (18,44) y la bielorrusa Yulia Leantsiuk (18,33). Las siguientes seis mejores se aprovecharon de la repesca. Su final será mañana. Hoy también se decidirá el pentatlón y las vallas. En la combinada femenina la francesa Antoinette Nana Djimou defiende el título ante las británicas Katarina Johnson-Thompson y Morgan Lake, esta de solo 17 años. Cerrando la jornada, las vallas masculinas se presentan más atractivas que las femeninas. Pocas de las grandes figuras se han animado a participar en esta competición en la que abundan las renuncias entre los 640 atletas de medio centenar de países que sí estarán. Los Mundiales de Beijing en agosto y estar considerado un evento menor son los motivos recurrentes. Pero eso no va con Renaud Lavillenie, el pertiguista francés que hace poco más de un año acabó con el legendario récord de Bubka (6,16 metros). Lavillenie se apunta a todo y confía en conseguir su cuarto título, algo inédito. El campeón olímpico en Londres es poco especulador, ni en pruebas ni en marcas. Le gusta competir y darlo todo, por eso lleva cuatro concursos superando los seis metros y en otros se ha quedado cerca. Le saca 16 centímetros al segundo Piotr Lisek y eso que el polaco está en racha. La calificación es hoy desde las 10.15. La holandesa Dafne Schippers, que dominó la velocidad en Zúrich con un doblete de 100 y 200 metros, va a por los 60 aunque su primera aparición será mañana (10.00). Tobalina no pasa la calificación Carlos Tobalina se quedó fuera de la final de peso. El pupilo de Carlos Burón, nacido en Barakaldo, se vio en la tesitura de superar los 20 metros para pasar la calificación pero empezó con un nulo, lanzó 18,94 y terminó con 19,18. El lanzador del Barcelona, que en la imagen aparece en el Velódromo defendiendo a su club en la Copa el 31 de enero, no pudo repetir su actuación del Europeo de Zúrich al aire libre donde acabó 9º, ni acercarse a su récord vasco (20,32). Ayer en Praga, a este estudiante de Económicas y único participante en este Europeo federado en la Vasca, le fallaron los cálculos puesto que lanzó un metro menos de lo que pretendía y terminó decimoséptimo. M.S. INCÓGNITA RUSA. El dominador en el medallero histórico no atraviesa su mejor momento. Los casos de dopaje están pasando factura entre deportistas y dirigentes. Yuri Borzakovskiy, el ochocentista que ganó el oro olímpico en Atenas, es el nuevo responsable y se estrena en Praga.