Hace apenas una semana, el Alavés regresó de vacío de tierras catalanas tras caer frente al Sabadell justo en el momento en el que más controlados tenía a los arlequinados. El calendario ha querido que la escuadra babazorra repita similar viaje -esta vez a Llagostera-, como si de una inmediata oportunidad de reivindicarse se tratase después de la decepción que supuso caer ante el colista.

Lo cierto es que, por pura probabilidad matemática, los de Alberto López cada vez están más cerca de volver a conseguir una victoria a domicilio, algo que no materializan desde hace cuatro meses. A partir de noviembre pasado, únicamente han arañado tres puntos lejos de Mendizorrotza en otros tantos empates frente a Girona, Recreativo y Barcelona B.

Y a priori no parece que el Municipal D´Esports sea una plaza muy propicia para regresar a la senda del triunfo foráneo, tanto por las características del juego que practica el adversario en ciernes, como por el momento favorable que vive. Acorde a las condiciones de su plantilla, el Llagostera practica un fútbol directo, sin complicaciones en el medio campo que origine pérdidas fatales, pero que le ha llevado a encadenar cuatro jornadas consecutivas invicto, con tres victorias y un último empate en La Romareda.

No es extraño, pues, que su técnico, Lluís Carrillo, haya sido reconocido como el mejor entrenador de Segunda en el mes de febrero o que la afición esté muy satisfecha con el rendimiento de los suyos, tras haber ganado en Iruñea, empatado con el Zaragoza y ganar tres de los cuatro últimos encuentros disputados en su estadio.

«Estamos muy contentos del trabajo de las últimas semanas y, sobre todo, esta. Volveremos a ver al Llagostera que conocemos: el que lucha y no baja la cabeza en ningún momento», avanzó el elogiado míster barcelonés, que ha conseguido dar con la tecla de un vestuario modesto, pero aguerrido.

Un contrincante en vena al que el Glorioso deberá hacer frente prácticamente con los justos y con muchos futbolistas en el banquillo que se han recuperado de manera meteórica y, por tanto, con pocas horas de rodaje y ritmo competitivo. Uno de ellos es el caso de Migue, titular indiscutible hasta que se lesionó y que ha vuelto a una convocatoria. Alberto López tendrá que elegir entre él y Einar, que también ha estado renqueante varias semanas, como acompañante de Jarosik.

Racha goleadora de Toti

Una de las bazas a las que se agarra el conjunto arabarra para traerse los tres puntos frente a la Llagostera es la racha goleadora que lleva encadenada Toti. El delantero salmantino, que ha arrastrado algún problema físico entre semana, pero que no parece que ello sea óbice para que esté en el once, ha anotado tres dianas en los últimos dos partidos que ha disputado.

No servirá de mucho que prorrogue su olfato asesino ante el área rival si el Alavés no vuelve al punto de solidez defensiva que recuperó en jornadas anteriores y que tanto se echó en falta en Sabadell, donde encajó bastante fácil y tuvo bastantes lagunas atrás, especialmente en la primera mitad del encuentro.