Yanukovich reivindica que es el presidente legítimo de Ucrania y solicita el concurso de Rusia
El depuesto presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, ha reivindicado que sigue siendo el presidente legítimo del país, ha denunciado que se ha visto obligado a abandonar Ucrania por su seguridad y la de sus familiares. Se ha mostrado sorprendido por el silencio de Rusia y ha afirmado que Rusia «no puede quedarse al margen».
En su primera aparición pública en una semana, después de verse obligado a huir de Ucrania, Viktor Yanukovich ha reaparecido en la ciudad rusa de Rostov y ha reivindicado que sigue siendo el presidente legítimo del país. «Nadie me ha depuesto, fui obligado a abandonar Ucrania por la amenaza contra mi vida y la de mis familiares», ha defendido, denunciando que «el poder fue tomado por nacionalistas», a los que ha acusado de representar a una minoría. Ha sentenciado que seguirá luchando «por el futuro de Ucrania y contra los que impulsan el terror para tomar el poder».
Vestido con traje oscuro y con gafas, Yanukovich ha respondido con calma a las preguntas dirigidas por los periodistas en una rueda de prensa que ha durado más de una hora y en la que ha reiterado en varias ocasiones que él es el único presidente legítimo de Ucrania.
Yanukovich también se ha referido a la situación que se vive en Crimea. Ha llamado a evitar «un baño de sangre» y ha defendido que debe seguir dentro de Ucrania, pero con mayor autonomía.
Preguntado sobre si se presentará a los comicios presidenciales del próximo 25 de mayo, convocados por las nuevas autoridades que él no reconoce, ha asegurado que no va a participar en unas «elecciones ilegítimas».
Silencio de Rusia y apoyo de Alemania al nuevo primer ministro
Sobre el papel jugado por Rusia hasta hoy, se hamostrado «sorprendido por el silencio» del Vladimir Putin y ha considerado que Rusia no puede mantenerse «al margen» ante los acontecimientos en Ucrania. No ha querido explicitar qué es lo que debería hacer Rusia, pero ha afirmado que Moscú «no puede quedarse al margen, no puede estar sin hacer nada» porque es «un país vecino». Ha añadido que Rusia debería ser capaz de «usar su influencia para prevenir el caos en Ucrania». Eso sí, ha querido aclarar que «cualquier acción militar en esta situación es inaceptable» y que no prevé pedir apoyo militar.
Por su parte, la canciller alemana Angela Merkel ha mostrado su apoyo al nuevo primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk. El portavoz de su ejecutivo ha anunciado que ambos mandatarios mantuvieron una conversación telefónica en la que Merkel «animó» a Yatseniuk a «tratar de estabilizar política y económicamente su país».
Berlín ofreció hace semanas su apoyo financiero a Ucrania. Las nuevas autoridades ucranianas han pedido ayuda al Fondo Monetario Internacional, ayuda que cifraron en 35.000 millones de dólares.