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Gasteiz propone nombrar hijo adoptivo a Lluís Llach a instancias de una petición ciudadana

El alcalde ha realizado esta propuesta en respuesta a una carta firmada por víctimas de 3 de Marzo y por rostros conocidos de la sociedad gasteiztarra, como son Joseba Azkarraga, Iñaki Lasagabaster y Katixa Agirre, entre otros.

El alcalde, Gorka Urtaran, ha recibido a víctimas del 3 de marzo y a representantes de la iniciativa ciudadana. (Juanan RUIZ/ARGAZKI PRESS)

El Gobierno local de Gasteiz, en manos del PNV, propone nombrar hijo adoptivo de la ciudad a Lluís Llach, auto de la canción ‘Campanades a Morts’, dedicada a las víctimas del 3 de Marzo de 1976. Esta propuesta nace en respuesta a una petición ciudadana, firmada Iñaki Lasagabaster, Andoni Txasko, Joseba Azkarraga, Txema Ramírez de la Piscina, Katixa Agirre, y Mikel Urdangarin, entre otros.

En una carta dirigida al alcalde, Gorka Urtaran, los firmantes afirman con aquella canción de Llach «supo recoger el espíritu y sentimiento que anidaban en una gran parte de la población vitoriana, alavesa y de Euskal Herria en general, así como en otros lugares donde surgió una tremenda y espontánea solidaridad».

Además, consideran que el cantautor catalán «reclamó justicia, protestó por el asesinato de razones y de vida, y reivindicó la lucha contra el olvido de los hechos, para que las conciencias de los culpables sintieran siempre el aliento de nuestras memorias, recordando y exigiendo justicia y el cese de tanta impunidad».

En una rueda de prensa ofrecida en la Casa Consistorial de la capital alavesa, el primer edil ha aplaudido esta «magnífica propuesta», y ha mostrado su esperanza en contar con el apoyo de todos los grupos de la oposición. En este sentido, cabe señalar que EH Bildu ya ha anunciado que apoyará el nombramiento de Llach como hijo adoptivo.

Por otro lado, Urtaran se ha referido a la polémica abierta por el Obispado, que no permite el uso de la iglesia de San Francisco en el memorial del 3 de Marzo. El alcalde ha reclamado a la Diócesis que permita el uso del templo, que el 3 de marzo de 1976, hace casi 40 años, fue escenario de una brutal actuación policial que se saldó con la muerte de cinco trabajadores.