Eurodiputados españoles protestan a gritos en Bruselas por la visita de Arnaldo Otegi
El pleno de la Eurocámara ha arrancado este miércoles con bronca por la visita a la institución del líder independentista vasco, quien ha sido descalificado con gritos de «asesino» y «sinvergüenza».
El presidente del grupo popular europeo, el eurodiputado alemán Manfred Weber, ha denunciado que la presencia de Otegi «es una provocación que ofende a las víctimas, el acoger aquí a un antiguo terrorista y darle foro y cancha y darle representación», y ha pedido que se debatiera la invitación de la Izquierda Unitaria Europea.
«Este proceder es intolerable en el Parlamento Europeo. Va contra la democracia, la libertad y la paz y espero que estemos todos juntos contra el terrorismo», ha insistido Weber.
El presidente de la Eurocámara, el socialdemócrata Martin Schulz, ha dicho tomar «nota de su intervención» pero ha rechazado «permitir un debate» sobre la visita de Otegi porque «no es un asunto que compete al pleno» salvo que haya «motivos de carácter penal que hayan sido invocados por los Estados miembro».
«Yo entiendo lo que usted siente, pero no puedo intervenir en contra de este tipo de invitaciones cursadas individualmente", ha zanjado.
La eurodiputada de la Izquierda Unitaria Europea Gabriele Zimmer, a la que Schulz ha dado la palabra por alusión a su grupo, ha defendido la presencia de Otegi con el argumento de que «tiene que haber una posibilidad para integrar en el debate democrático de este parlamento a personas que se han decantado conscientemente por un proceso de paz y participan en él activamente». Su intervención ha sido respondida por varios eurodiputados españoles con gritos de «sinvergüenza» y «es un asesino».