Pedro Sánchez desafía a sus críticos y propone Congreso y primarias en mes y medio
Pedro Sánchez pasa al ataque. Sin apenas valorar sus malos resultados en la CAV y Galiza, propone primarias para elegir secretario general el 23 de octubre y Congreso para diciembre. Intenta así enfrentar a los «críticos», a quienes ubica como partidarios de investir a Mariano Rajoy a través de la abstención, con las bases del PSOE, en teoría defensoras del pacto con Unidos Podemos. La última palabra la tiene el Comité Federal que se celebra este sábado.
«Necesitamos un proyecto autónomo y de izquierdas, un partido que hable con una sola voz». Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, pasa al ataque contra sus críticos y plantea un órdago: primarias el 23 de octubre y Congreso para los primeros días de diciembre. Con esta maniobra, el líder de Ferraz desafía a los críticos, capitaneados por Susana Díaz. Pretende contraponer su posición, en teoría partidaria de un Gobierno alternativo con Unidos Podemos y Ciudadanos, con la de los «barones», que en principio estarían dispuestos a abstenerse y permitir el Ejecutivo de Mariano Rajoy. Otra cosa es que, con este calendario, la realidad es que no tendría margen para formar gobierno, ya que la fecha tope para que no se convoquen terceras elecciones es el 30 de octubre.
La última palabra la tendrá el Comité Federal del PSOE que se celebra este sábado. Sánchez da por hecho que el cónclave avalará su petición, aunque «barones» como Guillermo Fernández Vara, presidente de Extremadura, ya calificaron previamente los planes del líder de Ferraz como «irresponsable». Ha reconocido Sánchez que el partido lleva meses dividido. Y ha planteado que la posición de su Ejecutiva es buscar una alternativa que no le convierta en «subalterno» del PP.
No ha sido claro Sánchez a la hora de definir su futuro. Se presentará como candidato a secretario general, pero sin determinar si dimitirá si el Comité Federal echa atrás su propuesta. «Estoy seguro de que se aceptará», ha sido su única respuesta.
En una jornada de pesimismo en Ferraz (la permanente de la Ejecutiva se ha alargado por espacio de más de cinco horas), con pésimos resultados tanto en las elecciones de la CAV como de Galiza, Sánchez aprovecha para reforzar su posición como jefel PSOE y busca afianzar su liderazgo de cara a unas terceras elecciones. Ha insistido en que ese no es su objetivo, pero el calendario no deja otra alternativa.
Habrá que ver si los críticos, que llevan semanas reuniéndose y amagando tratar de descabalgarle, presentan la batalla en el Congreso o intentan que este no se celebre.