Ecuador concede la nacionalidad a Julian Assange para tratar resolver su situación
La ministra de Exteriores de Ecuador, María Fernanda Espinosa, ha confirmado que su Gobierno ha concedido la nacionalidad al fundador de Wikileaks, Julian Assange, en un nuevo intento para resolver su situación en la Embajada del país en Londres, donde lleva recluido más de cinco años.
Espinosa ha indicado en una rueda de prensa que Assange solicitó la nacionalidad el 16 de setiembre y se le concedió el 12 de diciembre, y ha subrayado que su nuevo estatus fortalece la protección que le da el país.
No obstante, la jefa de la diplomacia ecuatoriana se ha mostrado consciente de que la concesión de la nacionalidad no soluciona automáticamente la situación de Assange y ha insistido en la necesidad de entablar un diálogo con Gran Bretaña y, en su caso, buscar una mediación internacional.
De hecho, ha revelado que «otra opción ha sido otorgarle una designación (diplomática) especial, amparados en la Convención de Viena, con el fin de incrementar sus posibilidades de protección». Este estatus, que se gestionó el 20 de diciembre, le permitiría salir de la Embajada amparado por la inmunidad diplomática y moverse libremente.
Pero las autoridades británicas han denegado la acreditación de Assange como diplomático. «El modo de resolver esta cuestión es que abandone la Embajada para enfrentarse a la justicia», ha dicho un portavoz del Foreign Office.
El nuevo Gobierno ecuatoriano de Lenín Moreno considera «insostenible» la continuidad de Assange en la Embajada de Londres. En un reciente comunicado ha enfatizado que se trata de «una situación heredada» para la que le ha tocado «buscar alternativas».
Desde el año 2012
El anterior Gobierno, presidido por Rafael Correa, concedió a Assange asilo político en 2012 pero Gran Bretaña, donde se encontraba en esos momentos, se negó a concederle un salvoconducto para que viajara a Ecuador, alegando que debía ejecutar una orden de detención cursada por la Justicia sueca.
Estaba acusado en Suecia de varios cargos de abuso sexual, entre ellos una supuesta violación, la acusación más grave. En estos años, la Fiscalía sueca ha archivado todas las causas contra Assange, bien por prescripción, bien por falta de pruebas.
Sin embargo, Gran Bretaña ha aclarado que en cuanto el fundador de Wikileaks ponga un pie en suelo británico será detenido porque las autoridades británicas también le acusan de violar las condiciones de su libertad condicional, lo que ha prolongado su estancia en la Embajada ecuatoriana en Londres.
Assange está recluido desde 2012 en la sede diplomática porque alega que, de ser detenido, será extraditado a Estados Unidos, que le persigue por publicar miles de documentos clasificados sobre las guerras en Irak y Afganistán que fueron filtrados a Wikileaks.