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Un observatorio velará en Nafarroa para garantizar los derechos en el final de la vida

El consejero de Salud del Gobierno de Nafarroa ha aprobado la constitución del Observatorio de la Muerte Digna, una instrumento que tiene como finalidad velar por el cumplimiento de los derechos en el proceso final de la vida y mejorar si es posible las medidas articuladas.

El director General de Salud, Luis Gabilondo, y el director del Servicio de Ciudadanía Sanitaria, Lázaro Elizalde, en la presentación del Observatorio de Muerte Digna. (GOBIERNO DE NAFARROA)

El observatorio ha sido presentado por el director general de Salud, Luis Gabilondo, y el director del servicio de Ciudadanía Sanitaria, Lázaro Elizalde, quienes han recordado que una ley navarra de 2011 ya se ocupa de la «muerte digna», lo que conlleva derechos para la persona y deberes para centros e instituciones.

Ahora se quiere dar un paso más para garantizar el «acceso universal» a esos derechos y una atención paliativa «personalizada», ya que se ha detectado que «la ley se aplica pero no se puede garantizar que se haga de forma generalizada ni en igualdad de condiciones», ha dicho Gabilondo.

Como ejemplo ha comentado que en pacientes oncológicos terminales el proceso y los tiempos estás bien definidos y se aplican, pero en otros casos, como crónicos o personas mayores, no se puede definir igual el tiempo hasta el final de la vida y eso hace que los procedimientos no siempre se pongan en marcha en el momento que sería adecuado.

Otro aspecto que se ha detectado que se debe mejorar es el lugar del fallecimiento de cada persona, ya que en 2016 el 51 % de las 5.727 personas que murieron en Nafarroa lo hicieron en hospitales y sin embargo las encuestas reflejan que la mayoría de la población desea terminar su vida en su domicilio.

El observatorio incidirá además en la descentralización de las voluntades anticipadas con el fin de que se pueden presentar en todos los centros de salud y otros de la red sanitaria pública navarra y sean accesibles para los facultativos de Atención Primaria como ya lo son en la historia clínica para los médicos especialistas.

En este sentido, Elizalde ha señalado que desde 2003 un total de 6.072 personas, el 63 % mujeres, han registrado en Nafarroa sus voluntades anticipadas y de esta cifra 717, el 12 por ciento, lo han hecho desde que se puso en marcha la descentralización del procedimiento, con una media de 250 al mes cuando antes era de algo más de cien.

Por eso el observatorio trabajará para «dar viabilidad a los derechos que recoge la ley» mediante labores de control y vigilancia de la realidad, la recogida de datos de cumplimiento y satisfacción, el análisis de posibilidades y la presentación de propuestas de mejora.

«Lejos de utilizar la tecnología como un mecanismo para prolongar la vida a cualquier precio, es necesario usarla como instrumento para conseguir nuevos escenarios en los que aliviar el sufrimiento en el proceso de morir sea una prioridad», ha subrayado Gabilondo, quien ha añadido que cada persona debería reflexionar sobre qué quiere llegado ese momento para no padecer ni ella ni su entorno.

Y es que la ley de 2011 recoge también otros derechos como el de decidir, el rechazo o la retirada de la intervención o la designación de un representante cuando se esté incapacitado.

Al mismo tiempo, la ley establece una serie de deberes para el sistema sanitario como el respeto a la intimidad personal y familiar en el proceso final de la vida, el acompañamiento, el auxilio espiritual o el apoyo al cuidador o familiar.

De esta forma, la actuación sanitaria queda supeditada al respeto a la libertad, las creencias de cada persona y su autonomía y por todo ello y por su mejora deberá trabajar este nuevo observatorio, que también fomentará la investigación y la formación del personal y con carácter posiblemente bienal presentará un informe.

«Queremos establecer garantías de la efectiva ejecución» de lo recogido en la ley porque «hay una demanda social evidente para que la muerte digna sea algo prioritario», ha concluido el director general de Salud.