Con Lula Da Silva ya en prisión, sus seguidores organizan la resistencia
El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula Da Silva pasó su primera noche en la cárcel mientras sus partidarios organizaron una «vigilia permanente» y esperan su puesta en libertad.
Luiz Inácio Lula da Silva llegó en helicóptero la noche del sábado a la sede de la Policía Federal donde empezó a cumplir su pena de 12 años y un mes de cárcel por corrupción y lavado de dinero. «La ciudad de Curitiba será el centro de nuestra acción política. Solo saldremos de aquí cuando Lula salga. Esta vigilia será permanente», proclamó la presidenta del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffmann, poco después de que la Policía lanzara bombas de gas lacrimógeno y balas de gomas para dispersar a la multitud, provocado nueve heridos.
Lula Da Silva, que lidera las encuestas para las elecciones de octubre, «no es un preso común, es un preso político, el primer preso político después de la reapertura democrática» en 1985, añadió Hoffman.
Partidos y movimientos sociales de izquierda comenzaron así a articular su resistencia. En el campamento «Lula libre», al borde del perímetro policial, con tiendas, colchones inflables y bastante abrigo, una inscripción indicaba el lugar de la «secretaría operativa» donde se atiende a la prensa.
«Nuestra Constitución está siendo rasgada. Es momento de lucha y resistencia. Tenemos certeza de que Lula no va a permanecer mucho tiempo aquí. Va a salir pronto», afirmaba Bartiria Leima da Costa, de 62 años, llegada de Río de Janeiro. Según la Central Única de Trabajadores se esperan decenas de caravanas de todas partes de Brasil.
Los seguidores del icono de la izquierda brasileña esperan que el próximo miércoles, el Supremo Tribunal Federal (STF) incluya en su agenda un nuevo debate sobre un asunto clave: a partir de qué momento un condenado puede empezar a cumplir su pena de prisión. Según la jurisprudencia actual esto es posible a partir de un fallo de segunda instancia, como el que dictó en enero un tribunal de apelaciones contra Lula. El STF denegó la semana pasada un recurso de la defensa de Lula para evitar la prisión; pero una de las magistradas que votó contra Lula dio a entender que era favorable a modificar la jurisprudencia actual cuando el asunto fuese tratado de forma general, y no por un caso específico.
Y eso podría ocurrir el miércoles si otro de los jueces del tribunal pide, como anunció, incluir el tema en la agenda. Aunque también la discusión podría ser postergada, sin fecha de reanudación, si un juez pide tiempo para pensárselo.
Confiando en que no pueda superar este nuevo capítulo jurídico, los detractores del expresidente celebraron eufóricos que esté en prisión y, espera, sobre todo, que no pueda concurrir a las presidenciales. El PT afirma que mantendrá la candidatura de Lula Da Silva y que irá hasta las últimas instancias judiciales para superar la inhabilitación.