Un juez que revisará la sentencia de «La Manada» defiende al juez discrepante
Joaquín Galve, presidente del TSJN que verá el primer recurso contra la sentencia por el caso de «La Manada», critica las palabras del ministro de Justicia sobre el juez que pidió absolver a los acusados. Galve sostiene que Ricardo González es «un buen juez».
El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Nafarroa, tomó ayer parte en la polémica que ha suscitado el ministro Rafael Catalá con sus insinuaciones hacia el juez Ricardo González, tras su voto particular favorable a la libre absolución de “La Manada”.
En una entrevista radiofónica, Galve afirmó que González «es una persona absolutamente normal, un buen juez». Además, aseguró que desconoce que el tan criticado juez tenga algún «problema singular», tal y como advirtió el ministro. Y por tanto, no entiende que Catalá sostenga que el CGPJ debió actuar preventivamente contra el magistrado.
La máxima autoridad de los jueces navarros considera que las palabras de Catalá suponen «un ataque directo a la independencia del Poder Judicial». Aun así, no entra en si debe dimitir o no, pues entiende que es una decisión «personal».
La irrupción de Galve en esta polémica es particularmente llamativa, pues como presidente del TSJN debe de resolver el recurso que todas las partes han decidido interponer ante la polémica sentencia. Las defensas insistirán en la libre absolución, mientras que fiscal y acusaciones reclaman una recalificación de los hechos probados, al interpretar que lo que allí se narra es una intimidación y, por tanto, el delito cometido sería una agresión y no un abuso.
El presidente del TSJN ha estado todo este tiempo muy pendiente del caso. Cuando los periodistas se acuartelaron en la sala de prensa de la Audiencia Provincial para seguir el juicio, Galve hacía visitas constantes, consciente de que la Audiencia se jugaba hasta cierto punto su imagen. Una polémica como la que se ha encendido era lo último que deseaba y, ahora, él se ve obligado a tomar parte.
La obligatoriedad de que los Tribunales Superiores de Justicia vean recursos en casos como el de “La Manada”, es una novedad pues antes iban directamente al Supremo (la modificación se introdujo en 2017). Concretamente, el TSJ navarro ha visto nueve causas por delitos similares a este y nunca ha endurecido la pena. Por contra, sí hay una absolución y una rebaja de pena.
En principio, la sentencia aparenta ser endeble. De una parte, porque ya son muchos los jueces que han manifestado que, con esos hechos probados, cabe calificarla como agresión. Por otra parte, también es débil porque tiene un voto discrepante que propugna la absolución. Por último, la pena también podría cambiarse sin necesidad de modificar la calificación.