Una nutrida manifestación reclama, 40 años después, sanfermines sin presos
Miles de personas han tomado parte en la manifestación convocada para Kalera en Iruñea para reclamar unos sanfermines sin presos, el mismo lema que hace 40 años provocó la intervención de la Policía y la muerte de Germán Rodríguez.
La manifestación ha partido de la antigua Estación de Autobuses y al frente la misma se han colocado familiares de los presos navarros con sus nombres, su localidad, la cárcel en la que se encuentran y la distancia que tienen que recorrer para visitarles. A continuación, una pancarta con el lema «Bada garaia. San Fermín sin presos».
Durante el recorrido por el centro de Iruñea, hasta la Plaza del Castillo, han coreado consignas a favor de los presos vascos.
En el acto del final de la manifestación, han recordado que el domingo se cumplen 40 años de los sucesos del 8 de julio. «Querían un castigo ejemplarizante contra la sociedad vasca, como lo habían hecho en Gasteiz años antes con la matanza del 3 de marzo», han destacado.
«La oligarquía franquista, todo el aparado del Estado, jueces, miembros de las Cortes franquistas, Policía, Ejército y Guardia Civil pretendían una reforma que no cuestionase el status quo en lo esencial. Frente a ello, una sociedad que clamaba por las libertades, ruptura democrática, disolución de los cuerpos represivos, derechos sociales y laborales, libertades políticas, autodeterminación para Euskal Herria y amnistía para los presos», han contextualizado.
Precisamente, una pancarta en la Plaza de Toros a favor de la amnistía y con el lema «Sanfermines sin presos» fue la excusa de la Policía para desatar la represión el 8 de julio de 1978, «para sembar el pánico en las calles de Iruñea».
«Desde entonces, en estos 40 años, las calles de Iruñea han sido testigo directo de una lucha permanente por la vuelta a casa de los presos y refugiados. 40 años después tenemos delante otros sanfermines. Cientos de prisioneros resisten mientras famliares y amigos son obligados a viajar miles de kilómetros para realizar las visitas», han denunciado.
«Aunque algunos quieran negar la evidencia, se ha abierto un nuevo tiempo políticos en Euskal Herria. Un nuevo tiempo político en el que la excepcionalidad que el Estado español impone a los presos políticos vascos solo puede entenderse desde la venganza y la debilidad política», han destacado.
«Por ello, entendemos que este nuevo tiempo nos interpela a todos a redoblar los esfuerzos para traer a todos los presos a casa. Los presos han de volver a casa y lo han de hacer cuanto antes y vivios. No hay excusas. Este país se merece la paz y la libertad y daremos lo mejor de nosotros mismos para conseguirlo», han añadido.
— Martxelo Díaz (@MartxeloDiaz) July 4, 2018