Los líderes de PNV y Podemos se lanzan reproches mutuos en los actos de campaña electoral
Andoni Ortuzar ha afirmado que Podemos es «un fraude al electorado vasco», y Lander Martínez ha advertido de que el PNV «se vende y pactar con el mejor postor».
El presidente de EBB, Andoni Ortuzar, y el secretario general de Podemos en la CAV, Lander Martínez, se han lanzado reproches mutuos en los actos de campaña electoral.
El primero ha acusado a la formación morada de ser «un fraude a al electorado vasco». «Nunca tantos votos vascos han sido tan mal utilizados, tan mal representados en Madrid como los que se han dado a Podemos», ha señalado Ortuzar en un mitin celebrado en Eibar, municipio en el estuvo el pasado fin de semana el líder de la formación morada, Pablo Iglesias.
Ortuzar le ha reprochado que hable de «blindar el autogobierno» cuando «en los últimos años todas las iniciativas que han presentado en el Congreso de los Diputados invadían competencias propias de Euskadi, de nuestro autogobierno, de nuestras instituciones». «So pretexto de representar la progresía y de marcar paquete en la pelea de gallos e la izquierda española, se pasaban el autogobierno vasco por el arco del triunfo», ha añadido.
Y ha lamentado que Podemos «se atreva» a criticar al PNV, al asegurar que «mercadea» con el autogobierno. «Reclamar lo que es nuestro, de todos los vascos, ¿es mercadear? ¿Cuántas veces ha exigido Podemos en Madrid que se transfieran a Euskadi las competencias pendientes en el Estatuto? ¡Ninguna!», ha enfatizado.
«Mendigar derechos»
Por su parte, Martínez ha cuestionado si es de fiar un partido como el PNV que «se vende y pacta con el mejor postor». Ha aseverado que el PNV «en contra de los intereses de la gente común para traer negocios a las constructoras y a las grandes empresas».
Martínez ha realizado estas declaraciones en un acto organizado en Ortuella, en el que también ha ha participado Juan Carlos Monedero, uno de los fundadores de Podemos. Este ha contrapuesto al PNV, «que siempre ha ido a mendigar derechos a Madrid», con la lucha de los pensionistas vascos, plena de «memoria y dignidad».