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Entrevue
Edurne Eguino
Cabeza de lista de Izquierda-Ezkerra a la Alcaldía de Iruñea

«Hay que generar un espacio unido a la izquierda del PSN, pero tal vez no es el momento»

A pesar de la variedad de candidaturas en el espectro de izquierda, la cabeza de lista de I-E a la Alcaldía de Iruñea, Edurne Eguino, aspira a repetir e incluso ampliar la representación de su partido en el Consistorio, donde «lo hemos hecho muy bien», aunque aprecie  «claroscuros» en la legislatura que termina.

Edurne Eguino, candidata de Izquierda-Ezkerra a la Alcaldía de Iruñea. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)

La legislatura del Cambio en Iruñea empezó repleta de ilusión. ¿Le parece que se han cumplido las expectativas creadas en junio de 2015?
Empezamos bien, firmando un acuerdo programático con medidas muy concretas. Y para Izquierda-Ezkerra en concreto, ese acuerdo ha sido la guía en los tres años que hemos gestionado el Área de Acción Social. También es cierto que están sus claroscuros. El error más grave fue la patada, hace casi un año, a Izquierda-Ezkerra y Aranzadi del Gobierno municipal, que les ha colocado a Geroa Bai y EH Bildu en minoría y con necesidad de acordar, de tener otra actitud, algo que ha sido positivo. Creo que todos hemos aprendido de estos cuatro años y, en ese sentido, a la hora de reediciones de pactos, todo lo que hemos aprendido lo vamos a poner encima de la mesa.

Como ha recordado, después de tres años de trabajo conjunto, las tensiones entre socios terminaron desembocando en la salida de Aranzadi e I-E del equipo de Gobierno municipal. ¿Cómo vivió aquel momento de 2018? ¿Se lo esperaba?
No me lo esperaba. El gran acierto del acuerdo a cuatro fue unir lo común de quienes éramos diferentes en beneficio de la sociedad. Y eso hay que saber gestionarlo, con confianza mutua, dejando los celos a un lado y la necesidad que a veces tenemos los partidos políticos de sacarnos la foto en frente del otro. Donde creo que más crujió el asunto fue en Movilidad, pero el tiempo nos ha dado la razón, porque lo que se plantea en Pío XII era lo que proponíamos los que nos quedamos en minoría. Hay enseñanzas importantes, porque el futuro tiene que ir por ahí, uniendo a diferentes.

A pesar de lo ocurrido, posteriormente no han faltado acuerdos de I-E con el equipo de Gobierno. ¿En el fondo, estaban condenados a entenderse?
No hay otra. Era eso o abrir otra vez la puerta a UPN, cuya gestión de la ciudad ha sido nefasta. Sí que se ha abierto la puerta al PSN, por ejemplo en el caso del Presupuesto, porque Aranzadi creo que no ha estado a la altura. Esto tiene que ser una enseñanza clarísima.

¿Es muy diferente la Iruñea de 2019, tras cuatro años de Cambio, de la ciudad gobernada por UPN hasta 2015?
Es diferente en sensaciones, en el aire que se respira, pero no nos podemos quedar solo en eso. Hay que hacer cosas concretas, como arreglar todas las viviendas municipales. Ese es es uno de nuestros principales ejes, porque no entendemos que haya partidos como UPN y Geroa Bai que no quieren tocar las viviendas de Autobuses y proponen algo muy etéreo. El derecho a la vivienda digna es fundamental, porque hay montones de mujeres solas con menores viviendo en habitaciones de manera indigna.

Ese es uno de los ejes del programa de I-E para Iruñea, pero ¿qué otras propuestas plantean para la próxima legislatura?
Hemos empezado a hacer ejes de movilidad, pero el urbanismo es lo que vertebra la ciudad y el plan de esta ciudad tiene veinte años de antigüedad y es antiguo en los criterios que maneja, como atraer los coches al centro, algo que debe cambiar. Hay que revisar el Plan Urbanístico para que todos los barrios tengan ejes de movilidad sostenible donde se garantice que hay espacios públicos para todas las edades, donde se pueda jugar, hacer deporte, estar, y donde la prioridad sea para peatones, ciclistas separados de los peatones, y para el transporte público. Y los coches no tienen que entrar al centro de la ciudad y por ello hay que contar con aparcamientos en la periferia. Tenemos un problema de parkings en el Casco Viejo y el Ensanche para residentes, mientras disponemos de aparcamientos en el centro que están a medio gas. ¿Por qué no asumimos la gestión municipal de esos parkings y los ofertamos a precio de alquiler a los residentes?

De cara a las próximas elecciones se han multiplicado las candidaturas en el espectro de izquierda. ¿Esa división se ha convertido en la principal amenaza para el Cambio por los votos que pueden quedar sin representación?
Quiero quitarme el peso de que seamos Izquierda-Ezkerra quienes dividimos, porque nuestra trayectoria viene de antes. Ha habido intentos de casar proyectos, pero no se ha logrado. Hay que generar un espacio a la izquierda del PSOE que cuanto más unido esté, mejor, pero tal vez no es el momento. En conjunto, no siempre las uniones suman, lo estamos viendo con Navarra Suma, que está restando, aunque también está Vox, que es un tema muy importante y ante al que hay que movilizar mucho a la izquierda. De todos modos, a nivel local se vota a la persona, la cercanía, el conocimiento de cómo se ha actuado en el Ayuntamiento y pensamos que es posible sumar tantos concejales como tenemos ahora, los cuatro de Aranzadi e I-E. Aunque se consolidaran en distinta distribución, nuestra aportación al Cambio estaría garantizada.

¿Qué le anima a pensar que I-E sí reeditará su representación en el Ayuntamiento?
Yo estoy esperanzada, porque lo hemos hecho muy bien. Si en 2015 nos quedamos a pocos votos de la segunda concejalía, ahora es posible que la consigamos, porque hemos puesto encima la responsabilidad, la solvencia de nuestro trabajo, por haber gestionado directamente un área como Acción Social con muchas mejoras.

¿Apostaría I-E por repetir la fórmula del acuerdo alcanzada en Iruñea en 2015?
Estaríamos por la labor, aunque de los errores se aprende y seríamos más exigentes de lo que fuimos en 2015. El seguimiento de lo acordado debe ser realizado por una comisión, algo que hemos pedido a gritos y que en el Gobierno de Navarra se estaba haciendo. Otro requisito va a ser que organicemos el Ayuntamiento de una manera más equilibrada, porque el trabajo es ingente, tiene que ser compartido y con una organización en función de las necesidades de la ciudad. Y pongo dos ejemplos. La división en dos del Área de Acción Social y Desarrollo nos pareció nefasta, ya que había otras maneras de dar entrada a Geroa Bai, y debe revertirse. Y otra es que el cuidado de los parques y jardines debe estar en Ecología Urbana.

¿Qué opina del PSN, que parece querer distanciarse de la derecha?
El PSN está dando unos mensajes muy calculados. En esta tierra, tiene un historial complicado y necesitaría dar un mensaje mucho más claro de que no va a ir con Navarra Suma si le dan los números y de que está comprometido en reorientar sus políticas diría liberales hacia políticas de transformación de la ciudad. Porque ¿qué quiere decir que no va a pactar con el PP, cuando ese partido aquí está con Navarra Suma?, ¿quiere decir que con UPN sí o que con Ciudadanos sí? Tiene que haber un compromiso mucho más real con el Cambio por parte del PSN.