Trump advierte a Irán de que «está jugando con fuego» al enriquecer uranio
Donald Trump advirtió ayer a Irán de que «está jugando con fuego» al haber superado el límite de uranio enriquecido fijado en el acuerdo nuclear suscrito en 2015, que EEUU abandonó tras su llegada a la Casa Blanca. París, Pekín y Moscú pidieron a Teherán, que rechaza las acusaciones y advertencias de Washington, que no sobrepase esos límites.
«Ellos saben lo que están haciendo, saben con lo que están jugando y creo que ellos están jugando con fuego», advirtió el presidente de EEUU, Donald Trump, al referirse a la decisión de Irán de superar el límite de uranio enriquecido establecido en el acuerdo nuclear de 2015 al no haber logrado compensación de la UE por las sanciones impuestas por Washington.
El lunes, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, informó de que Irán ya ha superado el límite de la reserva de 300 kilos de uranio enriquecido fijado en el acuerdo, que EEUU abandonó para retomar su política de sanciones.
La Casa Blanca ya había adelantado que proseguirá su campaña de «máxima presión» contra Irán hasta que sus líderes rectifiquen y reiteró que «nunca permitirá» que desarrolle armas nucleares. «El régimen debe poner fin a sus ambiciones nucleares y su comportamiento perverso», aseveró.
Y señaló que «incluso antes de la existencia del pacto Irán ya estaba violando sus términos», algo que Teherán volvió a negar al tiempo que avisó de que «si EEUU nos ataca, a Israel le quedaría media hora de vida».
El presidente francés, Emmanuel Macron, expresó su preocupación por la decisión de Irán y pidió a las autoridades persas que den marcha atrás. Reclamó a Teherán «que se abstenga de toda nueva medida que cuestione sus obligaciones nucleares». Además, dijo que proseguirá los pasos emprendidos para que Irán se ajuste a sus obligaciones y siga beneficiándose de las ventajas económicas de ese pacto.
Salvaguarda de Irak
Al igual que los europeos, Bagdad está inmerso en el proceso de dotarse de un mecanismo pra eludir las sanciones estadounidenses contra Irán, un sistema vital para Irak, altamente dependiente de la electricidad y el gas iraníes y fuertemente endeudado con su vecino.
Irak ha acumulado 1.700 millones de euros de atrasos en el pago de gas y electricidad a Irán y ha tenido que hallar una solución, con el beneplácito de EEUU. «El Gobierno iraquí –atrapado entre sus dos aliados– continuará comprando gas a Irán y depositando el dinero en una cuenta en Irak, en dinares iraquíes», señaló un alto cargo a AFP. «Irán no podrá retirar este dinero, pero sí podrá utilizarlo para comprar bienes fuera de Irak», añadió. «No tenemos otra opción, ¿de qué otra manera podríamos pagar por lo que debemos a Irán?», añadió.
EEUU ya le había otorgado a Irak una exención de sus sanciones contra Irán hasta octubre.