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La interlocutora de la delegación vasca en París ejercerá de asesora de justicia de Macron

La que ha sido interlocutora habitual de la delegación vasca que encabeza Jean-René Etchegaray -y también de las asociaciones de víctimas-, la exjuez de enlace entre París y Madrid Hélène Davo, abandonó el pasado 10 de julio la sede de plaza Vendôme tras ser nombrada como nueva «consejera de Justicia» en el Elíseo, según ha podido confirmar Mediabask.

Hélène Davo, ex jueza de enlace, fue condecorada por el gobierno de Sanchez.

La votación de la ley de programación y reforma de la Justicia ha sido la razón oficial para proceder a una remodelación en toda regla del Ministerio francés de Justicia, de acuerdo a las informaciones desgranadas en los últimos días por el vespertino ‘Le Monde’.

Uno de esos cambios ha tenido un especial significado no ya en París sino en Baiona, ya que hace ya unas cuantas semanas la delegación vasca conoció del nuevo destino que asumiría Hélène Davo, la que ha sido su interlocutora habitual desde que en el otoño de 2018 se oficializara el espacio de trabajo para abordar un cambio de política penitenciaria.

Ese diálogo ha dado como resultado más visible el que más de la mitad del colectivo de presos vascos en el Hexágono estén hoy en cárceles más cercanas de Euskal Herria. Concretamente a Mont-de-Marsan y Lannemezan, donde actualmente hay 25 presos vascos.

Ello tras el traslado de Mikel Karrera y Garikoitz Aspiazu a esta segunda cárcel, dos prisioneros a cuyo traslado puso reparos durante meses la propia Davo, aduciendo presiones de las asociaciones de víctimas, con las que, particularmente en los primeros compases del trabajo de la delegación vasca, mantuvo una relación fluida.

La representante de la titular de Justicia debió abordar la crisis suscitada por esa resistencia a «imprimir ritmo y profundidad» a los cambios en la política penitenciaria, lo que provocó a finales del año pasado un serio impás en el diálogo entre Baiona y París.

La movilización da resultados

La multitudinaria manifestación de enero en Baiona, que reunió a 9.000 personas y con ellas a un amplio elenco de electos y agentes de la sociedad civil de Ipar Euskal Herria, convenció a París de la conveniencia de superar ese escollo, y la propia Davo retomó los contactos a las puertas de la pasada primavera.

«La señora Hélène Davo no ejerce ya en su puesto de directora adjunta del gabinete de la ministra de Justicia, desde el pasado 10 de julio se encarga de una nueva función, en tanto que consejera de justicia del presidente de la República, Emmanuel Macron».

Con estas palabras confirmaba a Mediabask el traslado de Davo un representante de la secretaría del gabinete de la ministra de Justicia.

Hélène Davo remplazaría como consejera en materias de justicia ante el presidente de la República a Sonya Djemni-Wagner, que a partir de setiembre se ocupará de la Inspección General de Justicia.

Jueza de enlace entre París y Madrid

Davo accedió al puesto de directora adjunta del gabinete de Justicia en junio de 2017, tras haber ejercido durante años como juez de enlace entre París y Madrid.

En estos dos años de mandato en Justicia, ha recibido en distintas ocasiones a la delegación vasca que encabeza el presidente de la Mancomunidad de Ipar Euskal Herria, Jean-René Echegaray, y que integran además el diputado de la mayoría presidencial Vincent Bru, el artesano de la paz Michel Berhokoirigoin y la presidenta de Bake Bidea Anaiz Funosas.

La delegación recordaba, precisamente tras el deshielo del diálogo con París, los objetivos claves de su interlocución «para trasladar a París las demandas de la sociedad vasca en relación a los presos»: acabar con la dispersión y el alejamiento, completar la retirada del estatus especial DPS a todos los presos, y excarcelar a presos enfermos y con largas penas.

La Fiscalía, en posiciones de bloqueo

Dos recientes decisiones de justicia, las que han llevado a la Fiscalía a recurrir la excarcelación condicional de Xistor Haranburu (29 años en prisión) y de Lorentxa Beyrie ( 18 años en prisión), acordadas por los jueces, han añadido un nuevo elemento de preocupación en el seno de la delegación vasca que, a partir de setiembre, tendrá que recomponer relaciones con la persona que sustituya a Davo en el gabinete del Ministerio de Justicia.