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Fernández y López Obrador muestran su buena sintonía y su apuesta por la integración regional

El presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, considera «fundamental» la integración de América Latina tras reunirse ayer lunes con el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, en una visita de un día a México. López Obrador se ha comprometido a ayudar «en lo que pueda» a la recuperación de la economía argentina.

El presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, con el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, en el Palacio Nacional de Ciudad de México. (AFP)

El presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, ha escogido México para su primera salida al extranjero tras su victoria electoral. Aunque el encuentro tuvo carácter privado, la elección es significativa ya que, hasta el momento, Brasil ha sido el destino habitual de los mandatarios argentinos en su primer viaje al extranjero. Fernández, que el próximo 10 de diciembre jurará el cargo, mostró su buena sintonía con el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.

Fernández ha hecho hincapié en la necesidad de potenciar la integración de América Latina y de revitalizar los organismos regionales, algunos de ellos desactivados paulatinamente tras los cambios de gobierno en Ecuador, Brasil y durante el mandato de Mauricio Macri en Argentina.

«La integración para mí es un tema fundamental y en eso vamos a trabajar», ha afirmado Fernández en la rueda de prensa conjunta con López Obrador.

«Estoy empecinado y empeñado en hacer que América Latina vuelva a unificarse; podemos unir esfuerzos para enfrentar el desafío desde otro modo», ha insistido. Remarca que una de las cosas que deben hacerse es revisar qué es lo que ha pasado en América Latina «con la postergación de los grandes sectores de nuestras sociedades» que fueron marginados por las políticas aplicadas.

«Hacen falta políticas que vuelvan a recuperar a los abandonados por el sistema actual, que vuelvan a poner en el escenario social a los que han quedado al margen», ha destacado.

Se ha mostrado confiado en que su encuentro con López Obrador va a «fortalecer» la relación bilateral porque «tenemos muchas cosas en común que hacer por delante» y espera hallar también en los empresarios la misma afinidad que con el presidente mexicano.

López Obrador, por su parte, se ha comprometido a ayudar a Argentina, que sufre su peor crisis económica en 17 años. «Nosotros, en lo que podamos, vamos a procurar ayudar en la adquisición de bienes que se producen en Argentina para que el pueblo, con su nuevo gobierno, pueda enfrentar la crisis económica y pueda haber crecimiento y bienestar», ha remarcado.

Ha asegurado que Argentina saldrá adelante porque «es un gran país, con gran potencial, con grandes recursos naturales, mucha producción de alimentos; es un granero mundial».

«Y un pueblo bueno, que siempre ha luchado por la democracia. Tenemos muy buenas relaciones históricas. Cuando Argentina fue azotada por la dictadura vinieron muchos argentinos. Este fue su hogar. Eso es parte de nuestra política exterior», ha añadido.

Ha defendido la experiencia mexicana «de cómo no seguir aplicando la misma política económica que una y otra vez ha fracasado», en referencia al neoliberalismo.

En palabras de López Obrador, «no hay que seguir el mismo camino trillado» sino optar por cambios que implican «aplicar una auténtica política de austeridad, ser muy estrictos en el combate a la corrupción, que no haya lujos en el Gobierno».

«Y llegar a acuerdos con sectores productivos en Argentina, como en México y todos los países, para echar a andar al mismo tiempo todos los motores de la economía: la inversión del sector público, del sector privado y del sector social, que es tan importante por lo que aportan los trabajadores, los dueños de las tierras comunales. Todo junto», ha agregado.