Netanyahu intenta vender a Putin el «acuerdo del siglo» de Trump
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha presentado al presidente ruso, Vladimir Putin, en el Kremlin el «acuerdo del siglo» de Trump. Un plan que consagra los planes sionistas sobre Jerusalén y Cisjordania y hace inviable un Estado palestino.
El primer ministro israelí en funciones, Benjamin Netanyahu, ha asegurado al inquilino del Kremlin, Vladimir Putin, que el controvertido plan de EEUU es una «oportunidad única» para resolver el conflicto palestino-israelí.
Al recibirle, Putin no ha hecho mención alguna al «acuerdo del siglo», pero Netanyahu le ha recordado que «es el primer dirigente al que se lo presento y quiero hablar con usted y, por supuesto, escuchar su visión».
El primer ministro israelí reconoce así el creciente ascendiente de Rusia en Oriente Medio. En tiempos de la URSS, Moscú ya jugaba el papel de mediador, puesto que mantenía buenas relaciones históricas con ambas partes.
Rusia no ha reaccionado oficialmente y en detalle al plan, pero algunos portavoces han insinuado que parecería en contradicción con las resoluciones del Consejo de Seguridad y que los palestinos lo rechazan tajantemente.
El plan rebosa de concesiones a Israel. Concretamente, no solo le reconoce su soberanía sobre Jerusalén sino que bendice la anexión de colonias judías en la Cisjordania ocupada, particularmente en el Valle del Jordán, que se convertiría en la frontera oriental de Israel.
Tensión en Gaza
El Ejército israelí reforzó su presencia en Cisjordania y en la frontera con Gaza tras la presentación del plan.
Eso no impidió que a última hora del miércoles un misil fuera lanzado desde Gaza, tras lo que cazas israelíes atacaron objetivos de Hamas en la Franja.
Tanto la Autoridad Palestina (ANP) que gobierna en Cisjordania como la organización islamista palestina, en el poder en Gaza, rechazan el plan, «una copia calcada del plan de Netanyahu y de los colonos» en palabras del secretario general de la OLP, Saeb Erekat.
No son las únicas. Las iglesias católicas en Tierra Santa han deplorado en un comunicado conjunto que «este plan no aportará ninguna solución e incrementará la tensión y, probablemente, más violencia y nuevos baños de sangre».