Los test en la CAV: una oferta obviada, varios proyectos paralelos e incerteza
El lehendakari Iñigo Urkullu exigió el domingo a Pedro Sánchez «certezas», pero lo cierto es que, en el campo de los test, en la CAV campa la incerteza. Las pruebas, se ha dicho por activa y por pasiva, son cruciales para regresar a cierta normalidad y controlar nuevos brotes.
El lehendakari Iñigo Urkullu exigió el domingo a Pedro Sánchez «certezas», pero lo cierto es que, en el campo de los test, en la CAV campa la incerteza. Las pruebas, se ha dicho por activa y por pasiva, son cruciales para regresar a cierta normalidad y controlar nuevos brotes.
En la última semana se han realizado 1.600 pruebas diarias en la CAV, tanto de las basadas en PCR como de los llamados test rápidos repartidos por el Ministerio español de Sanidad. Es la cifra más alta registrada hasta la fecha y está permitiendo conocer la situación real en las residencias, pero las denuncias de varios sanitarios a título individual, de instancias como el Colegio de Médicos de Bizkaia o de numerosos sindicatos indican que todavía no hay suficientes test ni para el propio personal esencial. Ampliar la capacidad de hacerlos es, por tanto, prioritario.
En este sentido, sorprende que desde ningún departamento del Gobierno se haya dicho todavía nada en público sobre la iniciativa presentada el viernes por 55 investigadores vascos, que han desarrollado en auzolan un test que, optimizando los laboratorios disponibles, permitiría realizar 10.000 pruebas al día, a 15 euros el test.
La iniciativa sigue sin acuse de recibo en Sanidad, cuya titular, Nekane Murga, habló el mismo día de su colaboración con una empresa privada para desarrollar una «prueba rápida, segura y económica para detectar la enfermedad». Algo que, según los investigadores de la UPV, ellos ya han desarrollado.
Para completar la confusión, la agencia pública de promoción industrial (SPRI) emitió ayer una nota explicando sus esfuerzos en la crisis sanitaria. Entre ellos, hizo referencia a dos proyectos para desarrollar pruebas de diagnóstico, uno de la empresa Osasen y otro de Progenika Biopharma.
Como resumen, diferentes ramas del Gobierno de Gasteiz se han referido en los últimos días a tres proyectos diferentes para desarrollar test con empresas privadas, mientras la propuesta, ya desarrollada, de los 55 investigadores vascos duerme, al menos de momento, el sueño de los justos.