Trump utiliza la resistencia al confinamiento como arma electoral
Famoso por sus bandazos e incongruencias, que está repitiendo en la crisis del coronavirus, el presidente de EEUU, Donald Trump, está atizando la renuencia de sectores de la población al confinamiento como ariete contra Estados gobernados por la oposición demócrata, siempre con la vista puesta en las presidenciales de ¿noviembre?
En mayúsculas, y con escasos minutos de intervalo, Trump escribió en su cuenta a sus 80 millones de abonados: «¡Liberad Minnesota!», «¡Liberad Michigan!», «¡Liberad Virginia!».
En el caso de este último estado, añadió una apostilla, en referencia a la cuestión del derecho a llevar armas. «Y salvad vuestra formidable segunda enmienda. ¡Está en peligro!».
Esos tres estados están dirigidos por gobernadores demócratas, que han ordenado el confinamiento de sus habitantes ante una pandemia que ha dejado ya 30.000 muertos y más de 700.000 casos en EEUU, epicentro mundial del coronavirus.
En todos ellos, manifestantes han salido a la cale estos días contra la orden de que permanezcan en sus casas y para instar a sus gobiernos a que reabran la economía.
Tras la protestas a mediados de la semana pasada en Virginia, Michigan, Ohio y Kentucky, el viernes le tocó el turno a Minnesota. Cientos de manifestantes se congregaron a última hora del viernes ante la residencia del gobernador Tim Walz, en St Paul.
Pertrechados con banderas de EEUU, algunos con máscaras faciales y en muchos casos sin respetar las distancias, los manifestantes acudieron con pancartas con mensajes como «Eh Walz, solo quiero jugar al hockey», «La libertad es esencial», «La humanidad no es un virus» o «Paren el confinamiento».
El gobernador de Virginia, Ralph Northam, ha insistido en que «no es momento de enzarzarnos en una guerra en Twitter. Mi equipo y yo estamos en medio de una guerra biológica» contra el virus, ha recordado.
Limitar la compra de armas
Northam ha promulgado recientemente varias leyes para limitar la venta de armas y para aumentar los controles sobre los compradores («background checks»), lo que arroja luz sobre los iracundos mensajes del inquilino de la Casa Blanca.
Manifestaciones similares se prevén para hoy sábado a última hora en New Hampshire (Concord), Maryland (Annapolis), Texas (Austin), Colorado, Washington, Oregón e Idaho.
Coincidiendo con estas protestas que piden la reanudación de la actividad económica, Trump presentó el jueves un plan de reapertura del país en tres fases y dejó en manos de los gobernadores la decisión de «reabrir» la actividad en sus estados.
Contra el gobernador de Nueva York
Precisamente por este asunto, el magnate se enzarzó en directo con el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, uno de sus mayores detractores, mientras el demócrata daba su rueda de prensa diaria sobre la situación sanitaria.
Cuomo defendió que el Estado, el más afectado por la pandemia, no podrá reactivar su economía mientras no disponga de capacidad para hacer pruebas masivas de Covid-19, para lo que necesita ayuda del Gobierno federal.
Sin esperar a que terminase de hablar, Trump le atacó en Twitter: «Sal y haz el trabajo. ¡Deja de hablar! Nosotros construimos miles de camas de hospital que no necesitabas ni usaste, dimos un gran número de respiradores que deberías haber tenido y te ayudamos con las pruebas que deberías estar haciendo», protestó el presidente.
La diatriba de Trump se emitió mientras Cuomo aún contestaba a preguntas de los periodistas, lo que dio la posibilidad al gobernador de responderle en directo: "Lo primero, si está en casa viendo la televisión, quizás él debería levantarse e ir a trabajar ¿No?».