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El Covid-19 rompe todas las barreras del desempleo en EEUU, incluso la de 1929

La pandemia provocada por el Covid-19 ha roto todas las barreras del desempleo en Estados Unidos, incluso por encima de la Gran Depresión de la década de los años 30. La crisis golpea sobre todo a los más desfavorecidos. En poco más de cinco semanas el paro se ha disparado en 26 millones de personas, y se espera que abril se cierre por encima del 20%.

Un empleado trabaja en el fuselaje de un Boeing 737 MAX en Renton, Washington. El sector ha colapsado. (Stephen BRASHEAR/AFP)

Uno de cada seis empleos se ha destruido, algo que podría empeorar en mayo. Ninguna de las anteriores crisis en suelo estadounidense había llevado a las colas del desempleo a 26 millones de personas. La pandemia del Covid-19 está destruyendo la débil red del mercado laboral con facilidad y, a la vez, ya ha contagiado a más de 900.000 personas y ha llevado a los cementerios a más de 50.400 estadounidenses.

El tsunami devastador actual solo tiene una diferencia con la gran crisis de los años 30: aquella se mantuvo en una década, más o menos. Y, de momento, el Covid.-19 ha desbaratado el sistema económico y laboral de Estados Unidos en tan solo cinco semanas, a la espera de ver si luego hay un repunte fulminante el alza o no.

De momento, lo cierto es que nunca más Estados Unidos rebasó esos niveles de desempleo. Tras el crack de 1929 se calcula que se alcanzaron tasas del 14%, por debajo de las que se vienen. En los años 80 también creció, pero no a los niveles actuales. En estos momentos, hay una avalancha de cierres de empresas y personas arrojadas al paro.

Además, el dato sobre las solicitudes por desempleo no refleja toda la realidad del mercado laboral. Los trabajadores independientes e informales, que no pueden acceder a estos beneficios bajo las reglas vigentes, se queda por fuera de los registros oficiales, por lo que los datos pueden ser más catastróficos en estos momentos.

La clave que discuten diferentes economistas se encuentra precisamente si esta tasa de paro tan elevada en Estados Unidos se mantendrá en el tiempo. Están dividas las opiniones. Algunos creen que pasado el «golpe de la crisis sanitaria», la contratación volverá a reactivarse, pero son otros los que afirman que para que eso ocurra es necesario que remita la pandemia, lo que no se ve ve tan cerca y bien podría continuar hasta el próximo año.

Todo ocurre bajo las tensiones entre los estados y el Gobierno de la Casa Blanca de Trump. En principio, los gobernadores demócratas se han tomado más en serio el peligro que entraña la pandemia del Covid-19, mientras que el presidente de Estados Unidos ya habla de reapertura económica, ante la catástrofe sociolaboral que vive el país más rico del mundo.

Desfavorecidos, peor

El desempleo afecta más a las mujeres, ya que un 56% de las trabajadoras como cuidadoras de hogar han sido despedidas, según admite Instituto de Economía Política Progresista. A la vez, los afroamericanos y los latinos son los primeros en ser despedidos y, a la vez, son los más afectados por el Covid-19, como admite la Universidad Johns Hopkins.

Otro dato desgarrador es que Center for American Progress afirma que los blancos, por el tipo de empleo que desarrollan, tienen más del doble de probabilidades que los afroamericanos de teletrabajar y un 50% más de probabilidades que los latinos.

El seguro de desempleo es otra batalla que se vive en estos momentos en Estados Unidos. Porque se asegura que se otorgará un seguro de desempleo durante la pandemia, aunque cada póliza depende del Estado en el cual se haga la solicitud.

Según el portal del gobierno, benefits.gov, las solicitudes de seguro por desempleo dependen mucho de las reglamentaciones que hayan en el Estado donde se solicite. La información puede ser ingresada por vía telefónica, en el sitio en línea o en persona. Otro punto importante es que se debe incluir la declaración de impuestos de todo el término de trabajo que se va a asegurar, ya que es una de las reglamentaciones que exigen los seguros de los estados. La póliza permite entregar una cantidad específica dependiendo el salario y además, como una medida especial para incrementar el apoyo contra la crisis del Covid-19, se está otorgando un extra de 600 dólares por cada siete días, durante un total de 13 semanas.

En los territorios insulares como Puerto Rico, Hawai y las Islas Vírgenes, se requiere que se haya trabajado un periodo de un año como mínimo y  que el motivo del desempleo sea involuntario y ajeno al trabajador.

Según informó el Departamento de Trabajo, «el virus Covid-19 sigue impactando el número de peticiones de subsidio de desempleo». De hecho, el número de personas que percibían pagos del seguro por desempleo subió de los 11,91 millones de la semana que terminó el 4 de abril a los 15,97 millones de la semana pasada  y representa un incremento semanal de 4,064 millones de personas.