El Eibar cae con contundencia ante el Villarreal (4-0)

Tras un primer tiempo equilibrado, el encuentro se ha roto tras el descanso. Anguissa ha adelantado al Villarreal ante un rival que, con la defensa mermada, se ha roto y ha encajado otros tres goles en los diez últimos minutos. [Estadísticas del partido]

El Eibar despide la temporada encajando una goleada ante el Villarreal. Sin repercusiones, afortunadamente, más allá del mal sabor de boca que, previsiblemente durará hasta que los azulgranas comiencen sus vacaciones, entre esta noche y mañana.

Entre los que tendrán que esperar al menos hasta mañana para irse, lamentablemente, está Cote. El asturiano se ha retirado con claras muestras de dolor y preocupación tras lesionarse la rodilla derecha a los cinco minutos de la reanudación. José Luis Mendilibar reconocía tras el partido que había «preocupación» en la caseta aunque todavía no puede saberse nada. «Le están haciendo las pruebas manuales que se le pueden hacer ahora pero hasta mañana que no le haga más pruebas no podemos hacer nada. Mañana sabremos, esperemos que no sea nada».

Aunque sólo se quede en un susto, ojalá, ha sido lo peor de un partido que, sobre todo, ha aburrido. El resultado no refleja lo sucedido sobre el césped, con un primer tiempo equilibrado y una segunda parte de dominio local pero sin acción prácticamente hasta los últimos minutos.

De hecho en la primera media hora larga han sido los azulgranas los que han ofrecido una mayor sensación de peligro. Aunque las ocasiones se hayan limitado prácticamente a cuatro remates de Cote, Kike, De Blasis y Charles. Ha aparecido Cazorla, que ha reclamado protagonismo, y lo ha conseguido porque ha sido el mejor, en su despedida. Y según ha ido tocando con más comodidad el asturiano, ha empezado a desaparecer el Eibar. O quizá haya sido al revés.

El choque, de todos modos, no se ha roto hasta la segunda parte. La lesión de Cote, a los cinco minutos de la reanudación y precisamente cuando Inui acababa de sustituir a Soares, se ha dejado notar. Y más aún la de Bigas, que había tomado su lugar. Poco antes de marcharse el balear, Anguissa había adelantado al Villarreal, al recibir un balón de Cazorla para sortear a Sergio y batir a Yoel por bajo. Y matar el partido. Si, como sucedió contra el Valladolid, el viento hubiera ido a favor de los azulgranas, les habría animado otra vez a rascar el depósito en busca de las últimas gotas de gasolina. Pero el golpe ha sido en contra. Y con sólo veinte minutos de competición por delante, sin fuerzas, un once cogido con pinzas y cumplido ya el objetivo de una temporada extraña como ninguna, encontrar motivación y energía habría sido poco menos que un milagro.

No se ha obrado. Y el Villarreal ha tenido el camino libre para despedirse con una goleada. Primero una acción individual de Gerard Moreno, que recibía un balón de su guardameta para marcharse de Burgos y regatearle en dos ocasiones antes de batir a Yoel; después otra rápida acción colectiva culminada de nuevo por Gerard Moreno; y ya con el Eibar totalmente descompuesto, un pase en profundidad que ha rematado Moi, todo ello en ocho minutos, han noqueado a los armeros.

Mendilibar: «No sólo hay que pensar que hemos conseguido la permanencia, también en cómo han pasado las cosas»

José Luis Mendilibar acaba la temporada satisfecho, aunque no al cien por cien. «Hemos conseguido nuestro objetivo, la temporada que viene estaremos en Primera –subraya–. Pero hay que analizar muchas cosas. Han pasado muchas cosas que creo que hay que mejorar. No sólo hay que pensar que se ha conseguido la permanecia, también en cómo han pasado las cosas». Y es que el técnico recordaba que frente a un retorno de la competición espectacular, el Eibar lo había pasado muy mal en los meses previos al parón. «Estábamos muy justitos y con malas sensaciones», recuerda.

En lo que respecta al partido, ha explicado que durante «setenta minutos hemos estado ahí, compitiendo. Es verdad que hacia arriba nos ha costado hacer daño pero hemos competido, hemos presionado… Pero nos han metido el primero y luego ya ha sido muy sencillo para ellos. Con la lesión de Cote, que acababa de irse Soares, nos hemos roto. Nos ha costado ir arriba y nos ha costado defender. Nos han metido el primero y luego todos han sido iguales. Han hecho buenos pases, han jugado muy bien y nosotros hemos notado el cansancio, el calor, la humedad…».