Las escuelas de Angelu se preparan para el comienzo de curso con el covid-19

El año escolar empezará el martes en Ipar Euskal Herria. En Angelu este viernes han presentado las condiciones escolares de cara a este curso, y como las medidas preconizadas por el Gobierno en Primaria no implican prácticamente ninguna obligación para los alumnos, los horarios y servicios serán los habituales.

El curso escolar comenzará el lunes para los profesores y el martes para los alumnos, y aunque está marcado por la presencia del covid-19, las medidas tomadas para hacer frente a la expansión del virus básicamente se reducen a la utilización de la mascarilla en adultos y alumnos de Secundaria. Por ello, en la presentación que ha realizado este viernes el alcalde de Angelu, Claude Olive, el mensaje principal ha sido que las clases, las actividades extraescolares y el servicio de comedor se realizarán de manera habitual.

Las medidas tomadas para evitar la expansión del covid-19 después del confinamiento en mayo fueron muy estrictas, pero de cara a este comienzo de curso se han reducido mucho. Por ejemplo, se podrá volver a servir comida caliente en los comedores, y no fría para tomar en clase, como fue entonces.

Se recomienda a los padres y madres que al acompañar a sus hijos a la escuela lleven la mascarilla puesta, ya que es en esos momentos en los que se reúne el mayor número de gente, en un espacio bastante reducido. Olive ha declarado que si la situación tomase cauces peligrosos, obligará a su utilización a través de un decreto municipal, como ya lo ha hecho en el caso de los mercados.

En este sentido ha añadido que al contrario que en sus ciudades colindantes, Baiona y Biarritz, la utilización de la mascarilla no es necesaria en las calles de Angelu, ya que «no tiene centro», refiriéndose a la especial geografía urbana de la ciudad.

Evitar las clases sobrecargadas

En lo que respecta al número de alumnos por clase, ha declarado que espera que el Gobierno sea consecuente con lo que promete sobre los medios que va a poner para evitar el contagio. «Tratemos de evitar las clases sobrecargadas» ha declarado el alcalde. Este año habrá 2.009 alumnos, una cifra que no varía prácticamente respecto al curso anterior.

El inspector de la circunscripción que incluye Angelu, Emmanuel Capdepont, ha indicado sobre el reparto de efectivos del profesorado que le compete que tiene «buenas noticias», ya que se prevén efectivos para que haya ratios de 23,3 alumnos por clase. Ha incidido en que si esta cifra es de 24 alumnos por clase monolingüe, en el caso de las bilingües de euskara y francés será de entre 20 y 23.

El representante de Educación Nacional ha recordado el mensaje ofrecido por su máxima autoridad esta semana. El ministro Jean-Michel Blanquer declaró que hay que aprender a vivir colectivamente con el covid-19 y planteó tres escenarios posibles según el nivel de contagios. El primero es el actual, en el que se reúnen todos los alumnos en clase, e incidió en la importancia de las clases presenciales. El segundo escenario sería acoger a los alumnos a media jornada, y seguir el curso a distancia desde casa. Y por último cabría la posibilidad de confinamiento, en el que se volvería a la enseñanza a distancia, como ya ocurrió el pasado curso.

Abierto durante el confinamiento

Durante el confinamiento algunas escuelas de Angelu permanecieron abiertas para acoger a los alumnos cuyos familiares trabajaban en empleos indispensables para la gestión de la crisis sanitaria. Progresivamente se fue incorporando a los niños y niñas en dificultad escolar o social, hasta que el 11 de mayo abrieron oficialmente los centros escolares tras el desconfinamiento, como en todo el Estado.

Durante ese momento de crisis el Ayuntamiento acompañó a los profesores mediante el trabajo de 150 empleados. Este dispositivo tuvo un presupuesto de 40.000 euros. 

Los representantes del Consistorio también han informado de que este verano se han realizado obras de mejora en las escuelas de la localidad por la cuantía de 540.000 euros. Este gasto se incluye en el plan estructural de entre 2014 y 2020, que ha supuesto un presupuesto de 3.800.000 euros ligado a las infraestructuras escolares.