INFO

Iruñea inicia el cambio a tecnología LED de más de mil luminarias del alumbrado vial

El Ayuntamiento de Iruñea ha iniciado la sustitución de más de mil luminarias del alumbrado de diferentes calles y avenidas de la ciudad por otras lámparas de tecnología LED, con el consiguiente ahorro económico y energético.

La tecnología LED se va implantando en las farolas de Iruñea.

Las 1.058 luminarias se irán cambiando en los próximos meses con previsión de concluir en marzo. Estas pasadas semanas se han comenzado los trabajos en el polígono de Agustinos, la avenida de Sanduzelai y la avenida Marcelo Zelaieta.
 
Iruñea cuenta en la actualidad con unos 33.500 puntos de luz, que suponen un consumo anual de 15.000.000 KWh. Las lámparas LED de esas instalaciones lumínicas constituyen alrededor de un 15% del total. El ahorro anual estimado de energía que proporcionarán estas nuevas lámparas asciende a 640.500 KWh, es decir, un 4,2% del total, y cerca de los 100.000 euros. A ello, se suma el beneficio ambiental que puede cifrarse en una reducción de emisiones a la atmósfera de 115 toneladas de CO2.
 
En los próximos meses se seguirá trabajando en puntos de Agustinos y la avenida de Sanduzelai y se ampliarán las sustituciones a otras vías como la avenida de Nafarroa, la avenida de Zaragoza, la avenida de Gipuzkoa en Buztintxuri, la avenida de Atarrabia o las calles San Cristóbal y Magdalena en el barrio de Txantrea. La sustitución ha comenzado recientemente con los equipos generados hasta el momento, ya que las especiales circunstancias derivadas del covid-19 han retrasado su fabricación.
 
A diferencia de lo que ocurre en faroles clásicos tipo Villa, Fernandina, Munich, Pescador (por ejemplo Taconera o en Alde Zaharra), en que se realizan sustituciones tipo retrofit (lámpara y equipo), en este caso es necesaria la renovación de prácticamente toda la luminaria, excepto el soporte.

El modelo LED elegido cuenta con unas características que aseguran un óptimo rendimiento energético (superior al 90%) y lumínico, con una mínima emisión hacia el hemisferio superior (< 0,1%) y un mantenimiento de la uniformidad de iluminación de las vías. La vida útil de la lámpara LED es superior a 80.000 horas, casi cinco veces más que la de las lámparas sustituidas. La iluminación LED mejora la reproducción cromática (es decir, la apreciación del verdadero color de los objetos), permite reducir la potencia instalada en un 60% y, consecuentemente, reduce el consumo de energía.