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Saski Baskonia ya es séptimo de la Euroliga tras una jornada perfecta en el OAKA (82-97)

Con Giedraitis, Polonara y Dragic sumando por encima de los 20 puntos, Saski Baskonia ha pasado por encima de un débil Panathinaikos. Además, la jornada ha resultado perfecta tras las derrotas del Zenit de San Petersburgo y el Real Madrid ante CSKA de Moscú y Anadolu Efes, respectivamente.

Rokas Giedraitis ha jugado tal vez su mejor partido desde que fichó por Saski Baskonia. (Raúl BOGAJO / FOKU)

PANATHINAIKOS 82 - TD SYSTEMS BASKONIA 97

Señoras y señores, TD Systems Baskonia ha entrado de forma provisional en el Top 8. Séptimo, de forma provisional. Ha sido una jornada perfecta, una «jornada de transistores» sin igual, en la que los de Dusko Ivanovic han hecho su tarea, superando en el OAKA a un débil Panathinaikos. Y como ganar en el OAKA siempre trae premio adicional para los gasteiztarras, las derrotas del Zenit ante CSKA de Moscú y la paliza de Anadolu Efes al Real Madrid –logrando tanto los moscovitas como los otomanos el pase matemático para el Top 8– han metido a los de Dusko Ivanovic de cabeza en el Top 8. Por ahora, séptimos, a falta de que concluya esta jornada 32 y las dos jornadas restantes –más los choques aplazados–.

Polonara, con 36 de valoración –22 puntos y 11 rebotes–, un espectacular Giedraitis –25 puntos– y otros 22 tantos de Zoran Dragic han sido la punta de lanza de unos gasteiztarras que, partiendo de una defensa muy solidaria y aguerrida –enorme Tadas Sedekerskis–, han terminado por barrer a los helenos con un irreal 14 de 20 en triples –que ha llegado a ser de 9 de 10–.

«Hemos defensido muy bien, y en ataque hemos tenido fáciles situaciones de tiro porque hemos movido el balón muy rápido –24 asistencias– ha admitido un tranquilo Dusko Ivanovic. Pero lo mejor es que este equipo ha conseguido todo esto porque cree que puede estar en el Top 8», ha culminado el técnico montenegrino.

De cabo a rabo

Una noche de transistores que no ha podido empezar mejor, pese a que las primeras ventajas hayan sido helenas. Un 21-25 en el primer cuarto gracias a los 11 puntos de Polonara, contrarrestando los 10 que ha anotado Mitoglu en el bando heleno, y haciendo olvidar las rápidas dos personales de Ilimane Diop. La defensa gasteiztarra, con Pierria Henry de titular, ha vuelto a su ser, robando balones e incomodando a Panathinaikos, aunque, eso sí, ha sufrido en alguna ocasión para cerrar el rebote defensivo. En compensación, aparte de Polonara, Peters también ha encontrado con rapidez el camino de la canasta triple.

No ha tardado en escaparse el cuadro gasteiztarra, fruto de un triple de Dragic y una contra lanzada por Dragic y culminada por Polonara. Así, con 23-30 en el marcador, Oded Kattash ha tenido que llamar a capítulo a los suyos y el Baskonia ha podido hasta escuchar música en el tiempo muerto, sin miedo a las bengalas de otros años.

Por encima del acierto, ha destacado un muy motivado Giedraitis, jefe en la defensa así como en las transiciones. a ello le ha contribuido también un Panathinaikos desquiciado, más preocupado en protestar a los árbitros y pedir personales que en el jugar. La renta gasteiztarra se ha disparado en el 25-37, pero los helenos, coincidiendo con la salida de Pierria henry y Giedraitis, han reaccionado con un parcial de 9-2, con Mitoglou y Sant-Ross erigidos en los líderes de anotación, y obligando a Dusko Ivanovic a parar el reloj.

Y a introducir cambios –Polonara, Giedraitis y Pierria Henry–, viendo la mala defensa de Ilimane Diop, principalmente, al punto de que el PAO se ha arrimado 41-44. Pero la entrada de los titulares, con manos rápidas y actitud mucho más agresiva, ha balsamizado el juego baskonista –por no hablar de su ¡8 de 9! en triples, la mitad obra de Polonara–. Con 41-49 en tiempo de descanso, el semblante de Dusko Ivanovic ha vuelto a aclararse.

Otro parcial demoledor

«tenemos que afrontar la segunda mitad como si empezáramos de nuevo», ha dicho Dusko Ivanovic poco antes de arrancar el tercer cuarto. Y sus jugadores, obedientes, le han hecho caso, porque se han escapado con un parcial de 2-9 que ha roto virtualmente el partido, llevando el marcador a un 43-58.

Usando una estructura de pequeños –sin minutos a Fall ni Diop–, los gasteiztarras han sido muy agresivos en defensa, saliendo a escape en más de una ocasión –hasta demasiado rápido, cosa que ha costado alguna pérdida de más–, y con Polonara infalible desde más allá del arco.

Sant-Roos, ante la «ausencia» de Hezonja, ha clavado un par de triples, cosa que no le ha hecho ninguna gracia a Ivanovic. Pero gracia o no, la renta gasteiztarra se ha mantenido siempre por encima de la decena, uniéndose Giedraitis al recital de tiro de Polonara, más la segunda técnica que el banquillo local se ha ganado por sus continuas protestas.

A pesar del acierto postrero de Bochoridis y Mack, Saski Baskonia ha afrontado su último cuarto con un cómodo 59-72 en el marcador.

Los diez minutos restantes han sido a beneficio de inventario. El ex de Bilbao Basket Ben Bentil y Mario Hezonja han aprovechado para engordar sus estadísticas en estos largos minutos de la basura, mientras que el bando gasteiztarra –con una rotación alarmantemente breve, eso sí– ha seguido manteniendo la renta por encima de la decena. De hecho, si los de Ivanovic hubieran querido, la diferencia hubiera sido todavía mayor que el 82-97 final.

Triunfo sin Mike James

El CSKA de Moscú ha ganado por 74-86 en su visita al Sibur Arena de San Petersburgo, horas después de que el presidente de la entidad moscovita, Andréi Vatutin, diera el asunto como imposible de encauzar.

«La situación se ha convertido en un conflicto sin solución. Lamentablemente, solucionarlo no es posible, que es algo muy triste, pero es mejor reconocerlo y no vivir esperando un milagro», ha comentado Vatutin al diario digital «Championat».

«Los problemas que han surgido no se podían solucionar de un día para otro, por eso decidimos actuar sobre la marcha, pero la estabilidad en el equipo no la hemos logrado», ha subrayado el presidente del CSKA.

De hecho, el presidente Vatutin ha terminado alabando la figura de Itoudis: «En opinión del equipo técnico, la decisión de apartar a James responde plenamente a los intereses del equipo y nosotros creemos que le saldrán las cosas».

Y lo cierto es que el resultado ha sido óptimo para los de Itoudis –y el Baskonia–. Con Daniel Hackett, Shengelia, Voigtmann y Clyburn anotando un mínimo de 13 puntos, los del Ejército Rojo no se han acordado de Mike James, ya que se han llevado tres de los cuatro cuartos, pese a la resistencia del Zenit, liderada por Billy Baron, autor de 24 tantos.

Pero Kevin Pangos, pese a sus 12 puntos –todos tras el descanso– ha firmado un 2 de 10 en triples –8 de 28 para los de Xavi Pascual– y siempre han  ido a remolque, incapaces de poner su ritmo, con lo que se caen del Top, opción que también sonríe a Valencia Basket, siempre y cuando se imponga este miércoles a Olympiacos.

Paliza de Anadolu Efes

Ojo, eso sí, para las huestes baskonistas, porque Anadolu Efes ha barrido al Real Madrid: 83-108, y eso que el resultado al descanso era de 42-41. Hasta siete jugadores entrenados por Ergin Ataman han alcanzado los 10 puntos, con Krunislav Simon siendo el primer encargado de agujerear la cesta madridista, y Larkin, Sanli, Micic, Beaubois, Dunston y Singleton subidos al carro.

La anotación madridista siempre ha mantenido un ritmo constante, pero es que los otomanos han conseguido un parcial combinado en la segunda mitad de 41-67. Unido al mal average particular que los de Pablo Laso tienen respecto a los equipos de la Liga ACB, el Top 8 peligra seriamente para los merengues. Y Saski Baskonia, por supuesto, debe tomar buena nota de la capacidad anotadora de un Efes en la buena ola otra vez después de su inesperado tropiezo en Múnich.